Moldeando el carácter en tus hijos
Frases destacadas de este episodio:
- Cada uno de tus hijos es creado por Dios de una manera única.
- El temperamento de un niño es genético; no así el carácter, el cual se va formando, se desarrolla, y se va moldeando a través de la crianza. Por lo tanto, tú, como madre, juegas un papel importante en cómo se desarrolla el carácter de tus hijos.
- Eres un instrumento de Dios para moldear el carácter de tus hijos.
¿Qué nos dice la palabra en cuanto a moldear el carácter de nuestros hijos?
«Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza. Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón. Las enseñarás diligentemente a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes …
Frases destacadas de este episodio:
- Cada uno de tus hijos es creado por Dios de una manera única.
- El temperamento de un niño es genético; no así el carácter, el cual se va formando, se desarrolla, y se va moldeando a través de la crianza. Por lo tanto, tú, como madre, juegas un papel importante en cómo se desarrolla el carácter de tus hijos.
- Eres un instrumento de Dios para moldear el carácter de tus hijos.
¿Qué nos dice la palabra en cuanto a moldear el carácter de nuestros hijos?
«Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza. Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón. Las enseñarás diligentemente a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. Las atarás como una señal a tu mano, y serán por insignias entre tus ojos. Las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas». –Deuteronomio 6:4–8
- Dios te está moldeando a ti como madre cada día con tus experiencias diarias, de manera que tú puedas ser un instrumento en Sus manos para moldear así el carácter de tus pequeños.
«Y ustedes, padres, no provoquen a ira a sus hijos, sino críenlos en la disciplina e instrucción del Señor». –Efesios 6:4
- Es importante que críes a tus hijos con amor, paciencia, tolerancia, sembrando la semilla de fe sin provocarlo a ira. ¿Cómo es que puedes lograr esto cuando la maternidad parece difícil y sin esperanza? ¡Estando arraigada en la Palabra! Eso es lo único que podrá hacerte resistir los fuertes vientos de la maternidad.
«Pero debes saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. Porque los hombres serán amadores de sí mismos, avaros, jactanciosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, irreverentes, sin amor, implacables, calumniadores, desenfrenados, salvajes, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, envanecidos, amadores de los placeres en vez de amadores de Dios; teniendo apariencia de piedad, pero habiendo negado su poder. A los tales evita». –2 Timoteo 3:5
- Ninguna de nosotras quisiera ver a alguno de sus hijos desarrollando estos hábitos o estas conductas, por ello es tan importante moldear el carácter de tu hijo o hija, para que no llegue a ser alguien con estas características, sino un hombre o una mujer piadosa que conozca del Señor y busque agradarle.
«Porque tengo presente la fe sincera que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también». –2 Timoteo 1:5
- Tu ejemplo como madre juega un papel muy importante en la vida de tus hijos.
Tú no sabes cómo Dios usará la vida de tus hijos en un futuro. Mientras llega ese momento, tu tarea es sembrar, modelar a Cristo y enseñarles la Palabra.
«Cuando se pierden las riquezas nada se pierde, cuando se pierde la salud, algo se pierde, pero cuando se pierde el carácter, todo se pierde». –Billy Graham
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