¿Estoy criando a un hipócrita?
Al momento de corregir a tus hijos, ¿te estás enfocando solamente en su conducta o también estás siendo intencional en tratar con su corazón? Te animamos a pensar en esto y a evaluar si es que deberías ser intencional en comenzar a tratar no solo el comportamiento de tus hijos sino también su corazón.
Como mamá, quizás has sentido el temor de estar criando a tus hijos como hipócritas debido a que desde muy pequeños les enseñamos lo que se espera de ellos. Por eso es tan importante no solamente apuntar a su comportamiento sino también a su corazón. ¡Acompáñanos!
Frases destacadas del episodio de hoy:
- La Biblia nos enseña que nuestro problema es demasiado profundo para ser corregido externamente.
- La raíz del problema no es lo que hacemos, sino de dónde sale lo que hacemos: del corazón.
- Cuando hablamos de tratar con el corazón de nuestros hijos, no significa …
Al momento de corregir a tus hijos, ¿te estás enfocando solamente en su conducta o también estás siendo intencional en tratar con su corazón? Te animamos a pensar en esto y a evaluar si es que deberías ser intencional en comenzar a tratar no solo el comportamiento de tus hijos sino también su corazón.
Como mamá, quizás has sentido el temor de estar criando a tus hijos como hipócritas debido a que desde muy pequeños les enseñamos lo que se espera de ellos. Por eso es tan importante no solamente apuntar a su comportamiento sino también a su corazón. ¡Acompáñanos!
Frases destacadas del episodio de hoy:
- La Biblia nos enseña que nuestro problema es demasiado profundo para ser corregido externamente.
- La raíz del problema no es lo que hacemos, sino de dónde sale lo que hacemos: del corazón.
- Cuando hablamos de tratar con el corazón de nuestros hijos, no significa que vamos a ignorar su conducta. La conducta emana del corazón, por lo tanto, es importante hablarles de su conducta de manera que nos enfoquemos en un cambio de corazón, no solo en un cambio del comportamiento.
- Es necesario mantener el enfoque en el evangelio al momento de corregir y disciplinar.
- Cada oportunidad para corregir a tu niño es una oportunidad para confrontarlo con su profunda necesidad de perdón y gracia.
- Si hacemos de la conducta el enfoque de lo que está mal en nuestros hijos, nunca llegarás a la esperanza y el poder del evangelio en sus vidas.
- Al igual que nosotras, nuestros niños necesitan limpieza, perdón, una profunda transformación interna y el poder para cambiar.
- El poder del evangelio es nuestra esperanza en la maternidad.
Recursos recomendados:
- Blog, «¿Cómo ganar el corazón de un niño para Cristo?»
- Blog, «La mejor enseñanza que una madre puede darle a su hija»
*Ofertas disponibles solo durante la emisión de la temporada de podcast.
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