Disciplina: pastoreando el corazón de tus hijos

Muchas mamás no son efectivas en la disciplina porque no han entendido el concepto detrás de esta y han abrazado métodos psicológicos para entrenar o disciplinan con temor. Estos métodos son inefectivos y el niño o niña continúa en su conducta desobediente, desafiante o rebelde, y las mamás terminan perdiendo la paciencia. Por lo tanto, esta forma de disciplinar es inefectiva y antibíblica.

Frases destacadas del episodio de hoy:

• El entrenamiento bíblico ayuda a tus hijos a desarrollar el autocontrol, les ayuda a ser autogobernados y aprenden a tomar decisiones sabias.
• Muchos padres y madres piensan que solo razonando con sus hijos pequeños pueden hacer que ellos obedezcan, pero se encontrarán muy frustrados cuando el hijo no esté interesado en escucharlos. Este no solo es un método inefectivo, sino que no le enseña a los niños que el pecado tiene consecuencias.

Como padres tenemos la encomienda de criar a nuestros hijos en tres áreas específicas:

1. Mente
2. Voluntad
3. Emociones

Esto se resume en «pastorear sus corazones».

En el área de la mente:

Este nivel tiene que ver con lo que ellos saben o desconocen. Muchas veces los niños no se comportan correctamente simplemente porque ignoran la conducta adecuada. Si este es el problema, sencillamente lo debes manejar a nivel de su mente y enseñarle lo que debe aprender: reemplazar la ignorancia por la enseñanza.

En el área de la voluntad:

Esto tiene que ver con su decisión de obedecer o rebelarse; implica que ellos saben lo que tienen que hacer, pero desobedecen. Aquí debes emplear la disciplina y corrección.

El entrenar la voluntad envuelve un proceso de amonestación, exhortación y momentos de enseñanza, dando seguimiento a los episodios voluntarios con corrección y disciplina cuando sea necesario.

En el área de las emociones:

Esto tiene que ver con la forma en la que ellos manejan las situaciones. Ellos pueden saber qué hacer, pero están desmotivados o temerosos. Sus emociones pueden estarlos incapacitando.

• Debemos aprender a aplicar la disciplina correctiva a cada situación dependiendo de la motivación detrás del acto.
• La realidad es que la disciplina bíblica no es complicada, pero sí requiere convicción bíblica, tiempo, esfuerzo, determinación y consistencia.
• ¡La primera que debe disciplinarse a sí misma eres tú, mamá! Si no eres disciplinada, no vas a poder entrenar a tus hijos correctamente. Aplicar la disciplina empieza por disciplinarte a ti misma. 
• El seguir este diseño bíblico de la disciplina no va a garantizar que tus hijos sean creyentes porque solo Dios puede hacer que esto ocurra, pero si hacemos nuestra parte en entrenarlos, les daremos un regalo precioso que les traerá beneficios de por vida.

Pasajes bíblicos para ser animada:

«Instruye al niño en el camino que debe andar, y aun cuando sea viejo no se apartará de él». -Proverbios 22:6

«Un siervo no aprende solo con palabras; aunque entienda, no responderá». 

-Proverbios 29:19

Recursos recomendados:

• Episodio, «Recomendaciones y errores al disciplinar, parte 1»
• Episodio, «Recomendaciones y errores al disciplinar, parte 2»
• Episodio, «Disciplina: Entrenando a tus hijos a mantenerse en el camino de la vida»

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