Día 85 | 1 Samuel 19 – 20

Mientras la amistad entre Jonatán y David se hace cada vez más profunda, Saúl continúa con sus celos hacia David y vuelve a intentar matarlo. Jonatan, ingenuamente piensa que no puede ser posible que su padre desee hacer daño a David y le habla a Saúl para interceder, pero solo pudo apaciguarle temporalmente. Saúl estaba enfermo de celos.

1. Cuando Saúl intenta perseguir a David para matarlo, el poder del Espíritu de Dios es quien se interpone al punto de hacerlo a profetizar. Es imposible luchar contra Dios y vencer.

«Muchos son los planes en el corazón del hombre, más el consejo del Señor permanecerá». –Proverbios 19:21

2. Amistad incondicional entre Jonatán y David.

Me enternece ver el amor entre estos dos hombres. Pienso que la siguiente realidad es muy importante a la hora de establecer una amistad incondicional: «el Señor esté entre nosotros dos para siempre» (v. 20:23). Cuando el Señor está en medio de una relación como testigo y consejero, esa relación será prosperada.

«Un cordel de tres hilos no se rompe fácilmente». –Eclesiastes 4:12 (NBLA)

En los versículos 20:14-17 vemos que Jonatán con amor y humildad reconoce que David llegaría a ser rey sobre él (a pesar de Jonatan ser el heredero del rey). Veremos más adelante que David fue fiel a su promesa a Jonatán (vv. 20:14-17). Vamos a ver que David extiende misericordia (hesed, bondad; el amor fiel que Dios nos da a nosotros y que extendemos por gracia a los demás) a Mefiboset, su hijo paralítico, por causa de su amistad con Jonatán.

«El hombre de muchos amigos se arruina, pero hay amigo más unido que un hermano». –Proverbios 18:24

• ¿Cómo te relacionas con los demás? ¿Cultivas buenas amistades? ¿Piensas que podrías llegar a cultivar una amistad como esta? ¿Qué actitudes crees que son necesarias para cultivar una amistad similar?

3. En lugar de defenderse de los ataques de Saúl, David huye. 

David estuvo en peligro constante pero el Señor lo libraba de manera providencial. Había sido ungido como futuro rey, pero él no trataba de acelerar los planes de Dios tomando las cosas en sus manos. Él honra al rey y huye de su presencia para preservar su vida. Este tiempo de preparación sería necesario para equipar a David como Rey. 

«Humíllense en la presencia del Señor y Él los exaltará». –Santiago 4:10 (NBLA)

• Cuando eres atacada injustamente, ¿cómo respondes? ¿Dejas las cosas en manos de Dios o tratas de defenderte?
• ¿Si tu respuesta no es como la de David, de qué forma te retan los siguientes versículos?

«Pero que cada uno sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira; pues la ira del hombre no obra la justicia de Dios». –Santiago 1:19 (NBLA)

«Amados, nunca tomen venganza ustedes mismos, sino den lugar a la ira de Dios, porque escrito está: «Mía es la venganza, Yo pagaré», dice el Señor». –Romanos 12:19 (NBLA)

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