Día 3 | Génesis 8 - 11
El diluvio erradicó la humanidad y su corrupción. Dios lo usó como castigo ante la degeneración de los hombres y mujeres de aquel tiempo, y al mismo tiempo para mostrar Su gracia hacia aquellos que responderían en fe. Este episodio no terminó con la decadencia del ser humano, ya que ellos siguen en franca rebeldía y orgullo en contra de Dios. En su arrogancia intentarían construir una ciudad con una torre que alcanzara el cielo. Dios interviene soberanamente confundiendo su lenguaje y dispersándolos por toda la tierra.
En la lectura de hoy vemos:
1. La fidelidad de Dios obrando exactamente como le había prometido a Noé. Él le dijo que lo salvaría de la inundación que vendría, y así fue.
Dios le había hablado a Noé antes de ese evento y no le vuelve a hablar hasta cuando es hora de salir del arca. ¿Te imaginas cómo se debe haber …
El diluvio erradicó la humanidad y su corrupción. Dios lo usó como castigo ante la degeneración de los hombres y mujeres de aquel tiempo, y al mismo tiempo para mostrar Su gracia hacia aquellos que responderían en fe. Este episodio no terminó con la decadencia del ser humano, ya que ellos siguen en franca rebeldía y orgullo en contra de Dios. En su arrogancia intentarían construir una ciudad con una torre que alcanzara el cielo. Dios interviene soberanamente confundiendo su lenguaje y dispersándolos por toda la tierra.
En la lectura de hoy vemos:
1. La fidelidad de Dios obrando exactamente como le había prometido a Noé. Él le dijo que lo salvaría de la inundación que vendría, y así fue.
Dios le había hablado a Noé antes de ese evento y no le vuelve a hablar hasta cuando es hora de salir del arca. ¿Te imaginas cómo se debe haber sentido Noé? ¿Habrá dudado de la Palabra de Dios mientras estaba en ese barco ahogado por aguas que no cesaban? Pero, ¡qué maravilloso es ver que Dios no se olvida de Sus promesas! «Se acordó Dios de Noé» (8:1). Dios es Rey sobre todos los diluvios que azotan nuestras vidas.
«El Señor se sentó como Rey durante el diluvio; sí, como Rey se sienta el Señor para siempre». -Salmos 29:10
2. Cuando Noé sale a tierra, lo primero que hace es edificar un altar de remembranza. No quería dejar de adorar a Dios por Su fidelidad.
3. Al terminar con todo, excepto con la familia de Noé y un grupo de animales, Dios vuelve a darle el mismo encargo que le dio a Adán y Eva al principio de multiplicarse y poblar la tierra. Este mandato contrasta bastante con la cultura actual que nos rodea. Vivimos en medio de una cultura de muerte. Las personas no quieren tener hijos y los abortos son legitimizados en muchos países, contrario al mandato que vemos en Génesis 9:6-7:
«El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre. Mas vosotros fructificad y multiplicaos; procread abundantemente en la tierra, y multiplicaos en ella» (9:6-7, RVR60).
4. Hoy vimos también el deseo del hombre de glorificarse a sí mismo, de ser autosuficiente, y de obrar en independencia de Dios, tratando de construir una torre que llegue a los cielos. Debemos recordar que es Dios el único que exalta, honra o humilla al hombre.
5. Finalmente vemos a un Noé embriagado. El hombre fiel que caminaba con Dios y que tuvo la fe que ninguna otra persona tuvo en su época. Esto nos recuerda que el mejor hombre o mujer puede caer en tentación. Dios no oculta las debilidades de carácter de los siervos que usa. Vemos esto en la Biblia continuamente. Los usa a pesar de ellos mismos para que la gloria sea solo Suya.
Para meditar:
- ¿En algún momento, en medio de circunstancias difíciles, sientes que te ahogas y que Dios se ha olvidado de ti? Toma aliento con la historia de Noé. Las promesas de Dios son «Sí y Amén» y Él ha prometido nunca abandonarte. Él es soberano y nada está fuera de Su control.
- ¿Te detienes para recordar las obras maravillosas de Dios en tu vida? ¿Qué haces para recordarlas? Yo las registro en mi diario, y es maravilloso constatar a través de los años que Su mano y Sus promesas nunca se han apartado de mi vida.
- ¿Tratas de vivir de manera independiente de Dios o de salvarte a ti misma o de construir un nombre para ti misma? ¿Cómo te confronta la lectura de hoy?
«Entonces se acordó Dios de Noé…». -Génesis 8:1
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