Libertad
¡Hola Jóvenes Verdaderas! Hoy iniciamos una miniserie titulada: «¡Vive al máximo!», inspirada en nuestra conferencia Mujer Verdadera ‘23. Dedicaremos un episodio a cada una de las palabras que marcan el tema de este año: libertad, plenitud y abundancia. Y en este episodio exploramos el verdadero significado de la libertad y compartiremos maneras prácticas en las que puedes ser libre.
Frases destacadas
- La juventud es la etapa más marcada en la que el ser humano lucha por exigir su «libertad». Es en esa etapa en la que comienzas a desarrollar una mente individual y poner a prueba las convicciones o tradiciones familiares.
- Tristemente, muchas jóvenes compran las mentiras del mundo acerca de la libertad y son seducidas a pensar que esta se define como la habilidad de controlar la capacidad de vivir la vida sin supervisión o control, sin la necesidad de someterse a nada o nadie.
- Pero Dios tiene una …
¡Hola Jóvenes Verdaderas! Hoy iniciamos una miniserie titulada: «¡Vive al máximo!», inspirada en nuestra conferencia Mujer Verdadera ‘23. Dedicaremos un episodio a cada una de las palabras que marcan el tema de este año: libertad, plenitud y abundancia. Y en este episodio exploramos el verdadero significado de la libertad y compartiremos maneras prácticas en las que puedes ser libre.
Frases destacadas
- La juventud es la etapa más marcada en la que el ser humano lucha por exigir su «libertad». Es en esa etapa en la que comienzas a desarrollar una mente individual y poner a prueba las convicciones o tradiciones familiares.
- Tristemente, muchas jóvenes compran las mentiras del mundo acerca de la libertad y son seducidas a pensar que esta se define como la habilidad de controlar la capacidad de vivir la vida sin supervisión o control, sin la necesidad de someterse a nada o nadie.
- Pero Dios tiene una opinión completamente diferente, y, en realidad, esa es la única que cuenta. La libertad cristiana (en cualquier etapa de la vida) solo se encuentra al someternos al señorío de nuestro Señor Jesucristo.
- Lo que pensamos que la libertad ofrece es precisamente el poder escapar de toda autoridad, pero la cuestión no es si sabemos o no someternos a un amo y señor… El punto es ver a cuál nos sometemos. Quienes no están bajo el señorío de Cristo, están bajo el señorío del pecado. Punto.
- Aun cuando una joven se «siente» libre para entregarse a sus pasiones, en realidad ella está obedeciendo al amo de sus apetitos pecaminosos; está esclavizada en nombre de una falsa libertad.
- Esto sucedió por primera vez en el Edén. Eva quiso independizarse de Dios y terminó esclavizada por sus apetitos. A partir de ese momento, todo lo que era bueno fue dañado y quebrado. El ser humano a lo largo de toda la historia ha tratado de buscar libertad fuera de Dios y ha terminado más encadenado y más esclavizado.
- Las jóvenes de hoy en día buscan libertad de sus padres, libertad de todo sistema religioso, libertad de Dios… corren a buscar libertad en las cadenas que las mantienen atadas.
- El pecado nos engaña haciéndonos creer que somos libres para escoger dónde se encuentra el gozo, pero nunca cumple su promesa. Siempre terminamos engañadas.
- Cristo es distinto. Él ofrece libertad y cumple Su promesa.
- Dios sabía que ningún ser humano iba a encontrar libertad fuera de Él, así que proveyó la solución para la esclavitud. Él pagó el precio de nuestra condena en la cruz liberarnos de la esclavitud del pecado y de la muerte.
- No importa cuán esclavizada te encuentres, si depositas tu confianza en lo que Él hizo en la cruz para salvarte. Él abre la puerta de la cárcel en la que te encuentras y puedes correr con libertad porque Él te hace libre.
«y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres». -Juan 8:32
- Jesús es la verdad. Los hijos de Dios aman la verdad, aman a Jesús. Ese amor es la motivación correcta para abrazar la verdad de Su Palabra.
- ¿Cómo puede la Verdad (Cristo) libertarnos de la esclavitud del pecado?
- Esta libertad no es el resultado de una fórmula mágica, ni se trata necesariamente de pasos que tenemos que dar. Solo existen dos amos: Cristo o el pecado. Escoge bien a quien vas a servir. Quienes no están bajo el señorío de Cristo, están bajo el señorío del pecado. Punto.
- Aun cuando una joven se «siente» libre para entregarse a sus pasiones, en realidad ella está obedeciendo al amo de sus apetitos pecaminosos… está esclavizada en nombre de una falsa libertad.
- El poder de la esclavitud al pecado solo puede ser vencido cuando te sometes al señorío de Cristo. ¡Vence tu amor por el pecado por un mayor amor por tu Redentor!
Recursos recomendados:
- Conferencia: «Mujer Verdadera ‘23: Libertad, plenitud y abundancia»
- Serie, «Discierne la verdad en un mundo de engaños»
- Blog, «¡Libre Soy! ¿Libre Soy?»
- Reseña:¡Por fin libre! (Reseña) | Una herramienta para tu lucha contra la pornografía
*Ofertas disponibles solo durante la emisión de la temporada de podcast.
Únete a la conversación