Esperanza para tu confusión sexual

Temporada: Antes transgénero, ahora transformada con Laura Perry | Temas: Emociones , Evangelio , Jóvenes , Sexualidad

Ojalá hubiera hablado con mi mamá a una edad muy temprana. No sabía cómo expresarle a mi mamá cuánto me estaba lastimando. Ella no tenía idea de lo herida que estaba.

La ayudaría a hacer preguntas y tratar de trabajar en esa relación, en lugar de cerrarse y reprimir todas sus emociones.

Si creemos una mentira, puede ser un poco ligera al inicio y solo un grado o dos menos. Pero cuando pasan los años, te pones muy lejos del objetivo. Necesitamos creer que la Palabra de Dios es verdad.

Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas. (Proverbios 3:5-6)

Ojalá hubiera hablado con mi mamá a una edad muy temprana. No sabía cómo expresarle a mi mamá cuánto me estaba lastimando. Ella no tenía idea de lo herida que estaba.

La ayudaría a hacer preguntas y tratar de trabajar en esa relación, en lugar de cerrarse y reprimir todas sus emociones.

Si creemos una mentira, puede ser un poco ligera al inicio y solo un grado o dos menos. Pero cuando pasan los años, te pones muy lejos del objetivo. Necesitamos creer que la Palabra de Dios es verdad.

Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas. (Proverbios 3:5-6)

La mayoría de nosotros nos apoyamos en nuestro propio entendimiento. La mayoría de nosotros interpretamos la Palabra a través de lo que sentimos en lugar de creer que el camino de Dios realmente es bueno, que realmente entiende la forma en que nos creó. La forma en que nos diseñó y formó.

Lo más importante, aprender realmente a confiar en Dios y también decirle a la gente cómo te han lastimado. Fui abusada sexualmente cuando era niña y nunca le dije a nadie, y durante años eso me carcomió. Me hizo sentir que era diferente. Me hizo sentir como si estuviera dañada, como si fuera un producto usado. Todo eso fue una mentira del enemigo.

Si eres una mujer, Dios no te creó hombre. Pero esos sentimientos son reales y vienen de alguna parte.
El hecho de que tengas esos sentimientos no significa que tu conclusión al respecto sea correcta.
Tal vez a menudo miras a otras personas, y sientas que no eres la «chica femenina» o la chica popular, y empiezas a identificarte más con lo contrario. Es un intento de decir: «En lugar de tratar de ser eso y fallar, simplemente no voy a intentarlo en absoluto».
Hazle preguntas a tu amiga confundida y ora por ella. La oración es lo más importante porque la transformación es una obra del Espíritu Santo.

Puedo prometerte que, si estás luchando con la confusión de género, el camino de Dios realmente es mucho mejor. En aquel entonces no lo entendí. Estaba tan herida y estaba tratando de convertirme en lo que no podía encontrar en los chicos. Pero en ese momento no me di cuenta de que había 6,500 diferencias biológicas entre hombres y mujeres.

Cuando rechazamos la feminidad, es porque nos han lastimado. Pero si permitimos que el Señor nos sane y traiga esa redención, esa restauración, encontrarás tanta satisfacción en la forma en que te ha liberado.
Pensé que nunca podría amar ser mujer, pero ahora amo absolutamente ser mujer; incluso he aprendido que los caminos de Dios en la Biblia son realmente buenos.