Sabiduría financiera para la Gloria de Dios | Día 1
Carmen Espaillat: Como ustedes saben, los polos opuestos se atraen. Y cuando se trata de dinero y matrimonio, esto puede crear algunos retos. Escucha a una mujer describir su lucha,
Mujer 4: Tener un cónyuge generoso, o pensando en el generoso frente al tacaño, yo soy la tacaña y tengo un marido muy generoso. Voy a ser bien honesta acerca de esto. Así que muchas veces me siento muy culpable por no ser tan generosa; él daría todo lo que tiene.
Carmen: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss de Wolgemuth en la voz de Patricia de Saladín.
Hipotecas de alto riesgo, fianzas e incumplimiento de crédito. Antes de que palabras como éstas entraran en el vocabulario nacional, muchas personas se sentían muy bien acerca de sus finanzas y su futuro, pero Jan Thompson tenía una preocupación.
Jan: Bueno, con los estadounidenses gastando un 10% más de su ingreso, …
Carmen Espaillat: Como ustedes saben, los polos opuestos se atraen. Y cuando se trata de dinero y matrimonio, esto puede crear algunos retos. Escucha a una mujer describir su lucha,
Mujer 4: Tener un cónyuge generoso, o pensando en el generoso frente al tacaño, yo soy la tacaña y tengo un marido muy generoso. Voy a ser bien honesta acerca de esto. Así que muchas veces me siento muy culpable por no ser tan generosa; él daría todo lo que tiene.
Carmen: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss de Wolgemuth en la voz de Patricia de Saladín.
Hipotecas de alto riesgo, fianzas e incumplimiento de crédito. Antes de que palabras como éstas entraran en el vocabulario nacional, muchas personas se sentían muy bien acerca de sus finanzas y su futuro, pero Jan Thompson tenía una preocupación.
Jan: Bueno, con los estadounidenses gastando un 10% más de su ingreso, no es difícil darse cuenta de que esto se va a ir agravando eventualmente y finalmente con el tiempo, la gente quedará en bancarrota. Creo que viene una ola grave de unos días muy difíciles con estas formas creativas financieras, como por ejemplo lo que sucedió con los bienes raíces. Cuando veo ciertos tipos de hipotecas que mis clientes han asumido, una de las primeras áreas en que trabajamos es en rehacer eso porque sé que ellos se dirigen a una bomba de tiempo.
Carmen: La historia demostró que Jan Thompson estaba en lo correcto. Jan es una planificadora financiera certificada y autora de un libro titulado Gestión del laberinto del dinero (“Managing the Money Maze”). Esta semana ella estará proporcionando consejos útiles sobre las finanzas desde una perspectiva bíblica.
Cuando ella visitó nuestro estudio, Nancy comenzó haciéndole una pregunta a la audiencia:
Nancy DeMoss de Wolgemuth: ¿Qué considerarías una bendición en relación al tema del dinero o algo que sea un reto o una lucha?
Carmen: Espero que tú misma pienses en cómo responderías a esta pregunta. Escucha esta serie titulada, “Sabiduría financiera para la gloria de Dios”; Jan te dará algunas cosas en qué pensar.
Para ayudarte a evaluar algunos puntos, estaremos escuchando intervenciones de la audiencia. Algunas mujeres compartirán acerca de sus luchas y bendiciones, con Jan Thompson y Nancy.
Sandy: Bueno tan pronto hiciste esta pregunta, pensé, "No tengo ninguno." Pero cuando me puse a pensar en que durante unos 25 años de mis 28 años de matrimonio, yo era responsable de pagar las facturas y hacer presupuestos, los cuales nunca tuvimos, pero hace un par de años atrás, yo tuve que soltar todo eso.
Nunca fui capaz de mostrarle a mi marido la verdadera situación financiera. A pesar de que siempre ha hecho una gran cantidad de dinero para seamos bendecidos y para poder sobrevivir, porque él quería hacer ciertas inversiones y comprar algunas cosas - y estamos hablando de artículos de gran precio, bienes raíces, y cosas como esa y nunca fui capaz de decirle: "No. Esto no es algo que debas hacer”.
Hace unos tres años, cuando ya dije: "Tengo que mostrarle todo esto," Yo, literalmente, puse todo sobre la mesa del comedor. Él sólo dio un suspiro y lo soltó y luego dijo: "Bueno está bien, tengo un plan." Y él ha trabajado para eso, y estoy mucho menos estresada.
Ahora no tomo ninguna de esas decisiones. Si él viene y me dice, "¿Qué tal si compramos una computadora nueva, o “vamos a hacer esto," yo solo digo, "Si eso es lo que quieres hacer."
Él siempre sabía cuánto dinero estaba haciendo. Lo que él no se daba cuenta era lo mucho que tomo en sacar la familia hacia adelante, pagar las cuentas y hacer los pagos de la hipoteca y los pagos de bienes raíces y todo eso. Ahora todo eso está completamente sobre él, y él se ha levantado a eso y nos ha sacado de la deuda.
Ahora cuando llega ese bono, él sabe a dónde va, y no va a ir a parar en ninguna pequeña cosa frívola o incluso en unas vacaciones, como solía ser, cuando siempre me quedaba con ganas de pagar una factura con todo eso. Ahora él sabe que esas cuentas deben ser pagadas, y él nos ha sacado de la deuda sólo en unos pocos años.
Es increíble verlo y venir levantarse frente a ese desafío, pero ¿por qué yo no podía demostrarle eso a él antes?. . . Me sentía tan inadecuada de que yo no era capaz de hacer todo de la forma en la que él quería que fuera, la imagen que quería ver.
Nancy: Pero a la larga, Dios te ha usado como una ayuda para tu marido, que es para lo que Dios te hizo, y luego le dio a tu marido el deseo y el compromiso de tener un plan. Y Escucha la libertad. Se puede ver en su rostro, ¿no es cierto? Eso viene de tener un plan y de trabajar juntos como marido y mujer. Eso es un gran testimonio, Sandy.
Sandy: y Nancy para mí, personalmente, era una cuestión de sumisión. Siempre me consideré una esposa sumisa, pero cuando se trataba de dejarlo saber, "No, no es la forma en la que piensas que es. Yo sé que quieres hacer estas cosas, pero en realidad no deberías”. Yo no podía decirle que no. Yo no podía decirle que no. Así que ahora sólo le digo, "Lo que sea que pienses, está bien para mí."
Eso suena tan relajado pero, al mismo tiempo, se trata de poner las responsabilidades en él, donde deberían haber estado todos esos años. A veces, me lamento por eso, "¿Cómo hubiera sido nuestro matrimonio si yo no hubiera tomado su papel cuando éramos una pareja de esposos jóvenes?" Sólo porque soy contadora, eso no quiere decir que ese debía ser mi papel en mi matrimonio.
Nancy: Vamos a hablar más con Jan acerca de cuándo uno de los dos en el matrimonio tiene una mayor fortaleza en el área de las finanzas, cómo utilizar esa fortaleza, y cómo ustedes funcionan juntos como uno va a ser el objetivo en su matrimonio y en las finanzas, y en cualquier otra área.
Mujer 1: Me hubiera gustado aprender los principios de Dios temprano mi vida. Eso es lo que estás tratando de hacer enseñarles a las jóvenes con el propósito de ahorrarles muchos dolores de cabeza en su vida. El problema número uno en mi matrimonio siempre ha sido el dinero, y es porque uno de nosotros es generoso y el otro tiene la tendencia a no serlo, y es una cosa difícil de sobrellevar.
Muchas veces, como dijiste respecto a tu marido, te sientes como si él estuviera tomando algunas decisiones que no consideras que son correctas. ¿Cómo haces para decirle? Yo estaba escuchando a David Jeremiah, el otro día en la radio, y él puso a Esther como el ejemplo de orar mucho antes de hacerlo.
Así que he estado haciendo eso recientemente en una situación en la cual mi esposo se encuentra. Él es un contratista y constructor y, a veces la perspectiva mía como mujer puede ser un tanto diferente. Puedo ver algunos aspectos que él no ve.
Ese siempre ha sido nuestro problema, el dinero, y realmente sé que es mejor dar que recibir, pero eso estoy deseosa de escuchar lo que usted tiene que decirnos respecto a esto.
Nancy: ¿Jan quieres traer unas palabras de esperanza?
Jan: Hay esperanza. Eso entra en una dinámica interesante. Tom y yo somos exactamente lo contrario en estas áreas. Voy a compartir algunas herramientas y algunas ilustraciones de la vida real de cómo hemos tratado con eso y hemos llegado a un punto medio de ser generosos pero ser sabios a la vez.
Nancy: Y unirse más en su matrimonio como resultado de eso.
Jan: Oh, absolutamente. Ese es el punto. Dios no los diseñó para que sean dos. Si Él los puso juntos, entonces hay una relación sinérgica que Él está desarrollando, ya que pueden ser más eficaces para Su gloria juntos que lo que pudieron haber sido estando solteros, pero aprendiendo cómo completarse el uno al otro y no competir y tirar cada uno para su lado, puede ser un reto. Vienen, como Nancy dijo, de orígenes muy diferentes, pero es normal. No se necesitan dos iguales o una copia de la misma persona, por la gracia de Dios y la sumisión a Él en última instancia, y luego sumisión el uno al otro, se puede encontrar una gran armonía en esta área.
Mujer 2: Una de las bendiciones del dinero para mí es ser capaz de dar. Nosotros recibimos un montón de cartas de apoyo de misioneros a corto plazo, y tenemos ministerios que nos gusta apoyar, y por eso me hace muy feliz poder ser capaz de hacer cosas eso me hace feliz . Pero parte de la bendición de eso es que mi marido está muy dispuesto a hacerlo. Yo no tengo que rogar, suplicar o engatusar. Le pregunto si podemos dar, y él simplemente me dice: "Sí." Entonces hablamos de cuánto vamos a dar. Es un verdadero regalo el tener un marido que está dispuesto a dar y a compartir mi carga por eso.
Bueno creo que uno de los retos del dinero para nosotros ha sido la forma de enseñar a nuestros hijos sobre gastos, el ahorro y el vivir sabiamente. Nuestra hija mayor nos dijo recientemente que no habíamos hecho un buen trabajo para prepararla para su edad adulta. Ella tiene 25 años. Eso fue una verdadera sorpresa para nosotros porque pensamos que habíamos hecho un buen trabajo, pero metimos la pata en alguna parte.
Así que creo que es un reto saber cuánto debemos ayudar a nuestros hijos y que tanto tenemos que hacerlos pagar por las cosas y ser responsables de su propio sustento.
Mujer 3: Supongo que una bendición para nosotros es que recientemente he sido capaz de dejar mi trabajo y estar ahora en casa. Nosotros realmente no sabíamos si eso iba a suceder, y ha sido interesante ver cómo el Señor ha trabajado en eso. No hemos tenido que sacrificar nada en absoluto. Incluso, hemos sido capaces de dar.
Luchamos un poco, también, tratando de averiguar cuál es el mejor uso de nuestro dinero. Nosotros no siempre estamos de acuerdo en eso, pero ha sido una bendición ver a mi marido crecer en su deseo de dar. Bueno el suele decir que soy la más dadivosa. Él es más el de la acción, y hacer, pero yo por lo general quiero girar un cheque. Recientemente con una organización que habíamos apoyado financieramente de manera mensual ha habido una reversión abrupta; y ellos necesitaban un poco de trabajo físico. Y tuve la oportunidad de yo decirle a mi marido: "Nosotros damos fiscalmente, pero tenemos que dar físicamente."
Ha sido interesante ver al Señor cambiar esos roles y resolverlo para nosotros.
Nancy: Es interesante escuchar cómo muchas de ustedes están diciendo que las cosas relacionadas con el dinero las han ayudado a crecer, y a crecer en su matrimonio. El dinero es una de las herramientas claves de Dios en todo el proceso de santificación. Es algo que es muy terrenal, material y temporal en un sentido; pero en otro sentido, es una herramienta increíble para prepararnos para la eternidad. Creo que estamos escuchando este principio ilustrado en lo que varias de ustedes están compartiendo.
Shirley: Bueno me caracterizo por tener un lento aprendizaje en esta área. He sido cristiana desde niña, y he estado casada por 38 años, pero mi marido nunca ha tenido el deseo de ser el administrador del dinero en la familia. Debo admitir que me he sentido como si yo hubiera podido hacerlo mejor que él, a pesar de que he sido consciente de que en realidad debería ser el papel del hombre. Siempre ha sido estresante para mí. Me identifico con aquellas que han compartido sobre eso.
Y bueno en realidad nunca pensé que estaba manejándolo correctamente porque no se estiraba hasta donde yo pensaba que debería, pero en el último año, el Señor me ha permitido entregárselo todo a Él. Sigue siendo mi responsabilidad en vez de mi marido, pero el Señor me ha permitido confiar en Él con esto y dejar ir mi agarre del dinero un poco. Así que, me siento como que es el comienzo de un cambio en esa área de mi matrimonio. Estoy muy emocionada por estar aquí hoy porque estoy confiada de poder aprender algunas cosas que nos mueven en la dirección correcta en este aspecto.
Nancy: ¿Sabe tu esposo que tú has deseado que él tome más el liderazgo, las riendas en cuanto al manejo de las finanzas? ¿Es algo que hablas con él o que hablaste de ello los primeros 15 años, y ahora ya no hablan más de eso?
Shirley: en realidad no. No nos comunicamos muy bien en cuanto a eso. Es un aspecto en el que necesitamos comunicarnos mejor.
Nancy: ¿Él sabe que es un punto de tensión para ti?
Shirley: si probablemente.
Nancy: ¿Y su reacción a eso cual es. . .?
Shirley: Bueno el todavía no tiene ningún deseo de llegar ahí y ayudarme con eso.
Nancy: ¿Es algo en lo que él no piensa¿? No es algo que le molesta?
Shirley: Él no piensa en ello. Creo que él piensa que las cosas van bien, de la manera en la que están. Así que ¿para qué molestarse?
Nancy: Bueno creo que lo que tienes que hacer es confiar en el Señor mucho.
Shirley: Sí realmente así es.
Nancy: suena como que Él está empezando ese proceso.
Shirley: Sí. Por eso he dicho que soy un aprendiz lento. Tal vez si yo hubiera comenzado confiando en Él hace mucho tiempo en estas cosas, y le hubiera dicho: "Está bien, Señor. No puedo cambiar esto. Tienes que cambiarme," tal vez las cosas habrían sido diferentes desde hace un tiempo.
Nancy: Bueno, no es demasiado tarde para empezar a confiar.
Shirley: Así es gracias al Señor .
Nancy: Y estás aquí.
Shirley: Por supuesto. Nunca es demasiado tarde, y las situaciones no se desperdician porque nosotros aprendemos de ellas, crecemos, y aprendemos a confiar en el Señor, absolutamente.
Diana: Bueno en mi caso creo que mi mayor reto es también nuestra mayor bendición. Mi marido y yo tomamos una decisión hace unos años para simplificar nuestras vidas y salir de la gran presión del mundo corporativo, y terminamos en Arkansas. Tuvimos una enorme reducción de salario y un recorte en nuestra forma de vida, y desde entonces el Señor ha hecho tantas cosas en nuestras vidas.
He tenido la oportunidad de tener una reducción de salario y de tener un trabajo que me encanta. Y mi esposo ha tendido la posibilidad de ir a la Universidad para convertirse en un ministro, que es lo que su corazón ha querido durante 20 años, pero nunca se sintió digno. Nunca se sintió como si realmente pudiera hacerlo. Tuvimos cuatro hijos, y ellos ya están grandes ahora.
Es un poco como empezar de nuevo. Es realmente un gran desafío, pero es tan increíble la manera en que Dios está trabajando a través de todo lo que estamos haciendo. Es una gran bendición saber que nos sentimos como si estuviéramos alineados con Su plan para nosotros. Es un reto, pero es maravilloso.
Nancy: Hay tanta libertad cuando estás buscando al Señor y el saber que estás donde Él quiere que estés, en toda las áreas de tu trabajo, tus finanzas, tu planificación para el presente y para el futuro. Es una bendición escucharte compartir, Diana, la libertad que les ha dado a ti y a tu marido, a pesar de que estén involucrados en algunos cambios enormes.
Mujer 4: Bien, ¿sabes? pienso en una bendición que llegó justo a mi mente cuando dijiste eso, fue un momento difícil en mi vida. Me había mudado de vuelta con mis padres. Yo estaba embarazada de mi tercer hijo, y mi marido me había dejado. Pasamos de un ingreso muy importante a no tener ninguno, de la noche a la mañana. Él perdió su trabajo. Yo no sabía cómo iba a comprar comida y pagar los gastos médicos.
Una y otra vez Dios me bendijo en esta situación. Una vez recuerdo que la niña de la cual estaba embarazada, tenía que tener aparatos para el oído, tubos. Eso me iba a costar unos $300 dólares. Yo dije: "Yo no tengo $300 dólares," pero ella los necesita, por lo que di un paso de fe y dije: "Voy a seguir adelante y hacer esto, y voy a confiar en que Dios va a proveer." Él sigue proveyendo para mí, y lo hizo entonces en ese momento. Una amiga, de la nada, me envió un cheque por correo por $300 dólares. Ella dijo: "Mi marido me dijo que te envíe esto." Ella no sabía nada al respecto de mis problemas.
Eso fue un momento de “Wow Dios" cuando Él provee lo que necesitas. Eso fue maravilloso recordarlo.
El reto de las finanzas yo diría que es muy similar a lo que algunas de las otras personas estaban diciendo acerca de tener un cónyuge generoso o el ser generosa frente al cónyuge que es tacaño. Yo soy la tacaña, y tengo un marido muy generoso. Voy a ser muy honesta en cuanto a eso. Así que muchas veces me siento muy culpable por no ser tan generosa. Él daría todo lo que tiene, y yo le digo, "Pero tenemos cuatro niños, y tenemos que ponerlos en la Universidad." Yo soy la del pensamiento metódico. "Tenemos que estar seguros; no podemos dar todo ese dinero. Tenemos que hacer esto y aquello.” Así que existe esa lucha en mí, pero él es súper generoso, y yo no entiendo. Pero es asombroso.
Mujer 5: Creo que la bendición sería similar a lo que otras personas han dicho, siendo testigos de que Dios provee. Hubo un tiempo en que estábamos estudiando y en teoría no íbamos a ser capaces de lograrlo. Debimos habernos endeudado, pero no lo hicimos, y terminamos con dinero de sobra. Fue muy edificante ver esto y ayudó mucho a fortalecer nuestra fe.
El reto es también una bendición. Creo que mi marido y yo pensamos igual en cuanto al dinero, lo cual es bueno. No discutimos sobre el dinero, sino que los dos somos ahorrativos. Así que a diferencia de las demás, no hay uno generoso y otro tacaño.(mezquino, avaro, agarrado)
Nancy: Ambos son tacaños. (Risas)
Mujer 5: Sí básicamente. Nosotros damos, pero realmente luchamos con los límites de lo que es prudente. Los niños van a ir a la Universidad… ¿cuánto deberíamos ahorrar? Y la jubilación y todo eso… E incluso los gastos. Creo que nuestros hijos piensan que somos bastante tacaños también. ¿Dónde están los límites entre darles a ellos y esta mentalidad de escasez y enseñarles a ser buenos administradores? Es como que damos un paso adelante y otro hacia atrás en esto, y entonces, eso puede llegar a ser un problema de orgullo, también. Luchamos con eso.
Holly Elliff: Creo que el dinero es un desafío constante para nosotros. Tenemos una gran familia, muchos niños, y un salario no muy grande necesariamente. Así que, para nosotros, ha sido tanto una bendición como un desafío en el sentido de que, como confiamos en Dios con el tamaño de nuestra familia, lo vemos a él proveyendo, y por supuesto por el otro lado un desafío , nosotros siempre tenemos que confiar en Él para proveer para lo que viene.
En este momento tenemos uno de nuestros hijos entrando a la Universidad, nuestro quinto hijo entrando a la Universidad; uno se va a casar; uno espera un bebé; uno mudándose a otro estado, y así es, un reto constante que es realmente una empresa de fe. Mi marido realmente ama confiar en Dios, así que es muy fácil para él decir: "Oh, sí, sólo vamos a saltar aquí y a confiar en Dios," y él está seguro de que Dios va a estar allí, y Él está.
Bueno y para mí, es un poco más que un desafío tener que llegar ante el Señor y decir: "Dios, sé que eres lo suficientemente grande como para hacer esto. Pero yo no sé cómo lo vas a hacer, yo no entiendo muy bien como lo vas a hacer." Sobre el papel Nuestra vida no funciona, y es increíble cómo Dios hace eso.
Jan: Exactamente. Tienes toda la razón.
Nancy: estábamos hablando de eso anoche.
Jan: Sí. De hecho, mi marido también es así. . . . Él dice, "Vamos a confiar en Dios."
Nancy: Y cuando comienzas a vivir de esa manera y a caminar de esa manera, a veces dejamos perplejos a los contables a los contadores a los financieros, porque, en papeles, esto no tiene sentido.
Jan: Sí. Correcto. Yo les digo a mis clientes cuando estoy trabajando con ellos y ellos son cristianos, "Hay un factor de Dios en esta ecuación. Todas las hojas de cálculo que puedan ejecutar y los hermosos informes y proyecciones carecen absolutamente de sentido si Dios no está en la ecuación. Así que hay algo de esto que no podemos cuantificar que depende totalmente de Él".
Nancy: Eso es una buena ilustración de eso. Kim, tú tienes mucha experiencia confiando en Dios, también.
Kim Wagner: Sí Nancy yo también tengo tantas historias de cómo Dios nos ha bendecido igual que como Holly estaba compartiendo. Yo estaba pensando en eso. En que si miraras nuestros papeles y vieras nuestro presupuesto, la gente no creería o se imaginaria como Dios nos ha bendecido pero también como Él nos ha permitido en algunos momentos ser también de bendición para otros
Y al pensar en educar o enseñar a nuestros hijos en esta área, hemos estado meditando mucho en estas cosas porque queremos ser intencionales en enseñar a nuestros hijos a ser generosos y dadivosos. Nuestro hijo comenzó su primer trabajo este verano. Y finalmente este miércoles obtuvo su primer cheque de pago entonces nos sentamos con él para poder enseñarle a hacer un presupuesto, y le dijimos,: "Vamos a ver cómo piensas destinar cada cantidad de dinero para cada uno de tus gastos".
Lo dejamos que él comenzar primero y luego le dijimos, "Tú vas a estar pagando ahora tu gasolina, y hay otras obligaciones, que ahora vas a tener que empezar a contribuir." Así que cuando nos sentamos con él, y él comenzó a decirnos como pensaba usar su dinero, la primera cosa que hizo fue decirnos la cantidad que quería darle al Señor. Te imaginas eso fue una gran bendición para mí, él comenzó por esa parte que es la principal y esto es más grande de lo que yo jamás hubiera pensado que el habría dicho.
Entonces comenzamos a enumerar las otras cosas que debía incluir ese presupuesto, y ha sido un gozo verlo. Ayer mientras estábamos juntos le pregunté: "Dime hijo mío, ¿cómo te sentiste cuando diste el dinero en la caja de ofrendas? ¿Cómo se sintió eso? ¿No fue simplemente increíble darle esa parte al Señor? Y lo que cuenta lo que cuenta es que ha sido simplemente una verdadera bendición poder observar su actitud hacia el dinero "
Debido a que él ha sido criado en un hogar en que hemos necesitado vivir de un presupuesto, él ha tenido que vivir sin cosas que muchos de sus amigos han tenido. Pero también mi hijo ha visto a Dios hacer cosas milagrosas en proveer para nosotros como familia de maneras en que hemos sido, muy bendecidos, ni siquiera de nuestras propias manos o de nuestros propios ingresos, sino de una forma en que solo Dios de una forma soberanamente nos ha dado.
Carmen: Es posible que hayas reconocido a las dos últimas personas de la audiencia que intervinieron: Kim Wagner y Holly Elliff, colaboradoras regulares de Aviva Nuestros Corazones. Ellas, y otras mujeres de nuestra audiencia hoy, han estado hablando con Nancy DeMoss de Wolgemuth y nuestra invitada Jan Thompson.
Nancy les pidió identificar una bendición, y un reto, relacionados con el dinero. Espero que pienses en tu respuesta a esta pregunta: ¿Qué sería una bendición con relación al tema del dinero, y qué sería un reto o una lucha para ti? Mientras piensas en tu respuesta quédate con nosotras en los próximos días. Jan te ofrecerá buenos consejos sobre las finanzas desde una perspectiva bíblica.
Creemos que esta serie de radio te motivará a hacer los cambios necesarios en tus finanzas, pero recuerda, con solo escuchar es posible que no cambie nada. Espero que obtengas una copia del folleto de Jan, Gestión del laberinto del dinero. A través de este, ella te guía a dar los pasos que necesites dar. Serás desafiada a poner a Dios en primer lugar, a aprender de los ejemplos de mujeres en la Biblia, y a descubrir cómo sus historias se aplican a tus finanzas. Todo esto en el folleto, Gestión del laberinto del dinero.
Te enviaremos una copia impresa de este folleto por una donación a Aviva Nuestros Corazones, de cualquier monto. Podemos llegar a mujeres alrededor del mundo con estos mensajes, gracias a oyentes como tú que creen en lo que estamos haciendo y que quieren que este programa continúe en el aire.
Apóyanos con tu donación de cualquier monto a través de nuestra página web AvivaNuestrosCorazones.com, y pide una copia impresa del folleto Gestión del laberinto del dinero. Los envíos están disponibles para EEUU y Canadá.
Supervivencia, éxito, relevancia. ¿Cuál de estas palabras describe mejor tus finanzas? Jan Thompson te ayudará a responder esta pregunta mañana. Sintoniza tu programa Aviva Nuestros Corazones.
Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss de Wolgemuth es un ministerio de alcance de Life Action Ministries.
Jan Thompson es una representante registrada ofreciendo seguros a través Securities América, Inc., miembro de FINRA SIPC, y servicios de asesoramiento a través de Securities América Advisers, Inc. La información proporcionada en este programa es para fines de educación general solamente y no se deben interpretar como un consejo de inversión específica. Por favor, consulte a un asesor financiero en relación con su situación específica antes de implementar un plan de inversiones.
Los nombres usados en esta emisión no representan necesariamente la experiencia de cualquier cliente en específico. Estos ejemplos están destinados a ilustrar varios ejemplos de la psicología de los inversores y de ninguna manera deben interpretarse como una aprobación de la actuación de los servicios prestados por Janice Thompson, Strategic Financial Solutions, Inc., o las empresas de Securities América.
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