¡Hazme una sierva! 2da Parte | Día 8
Annamarie Sauter: En días recientes Nancy DeMoss de Wolgemuth nos ha animado a orar personalmente de las siguientes maneras…
Nancy DeMoss de Wolgemuth: Guarda mi corazón, lléname de tu amor, lléname de tu Espíritu, que esté vestida de humildad, hazme una sierva. En el día de hoy tenemos otra petición que va junto con tener un corazón humilde y es, dame un espíritu agradecido; una actitud de gratitud.
Annamarie: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy LeighDeMoss en la voz de Patricia de Saladín.
Requiere humildad orar todo esto, las personas orgullosas no sienten la necesidad de orar, pero cuando Dios está obrando en el corazón de sus hijos ellos comenzarán a orar de manera más bíblica. Ayer Nancy nos enseñaba acerca de cómo luce una verdadera sierva y cómo orar para que Dios haga esto una realidad en nosotras. Escuchemos la continuación de esta enseñanza.
Nancy: ¿Entonces qué significa …
Annamarie Sauter: En días recientes Nancy DeMoss de Wolgemuth nos ha animado a orar personalmente de las siguientes maneras…
Nancy DeMoss de Wolgemuth: Guarda mi corazón, lléname de tu amor, lléname de tu Espíritu, que esté vestida de humildad, hazme una sierva. En el día de hoy tenemos otra petición que va junto con tener un corazón humilde y es, dame un espíritu agradecido; una actitud de gratitud.
Annamarie: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy LeighDeMoss en la voz de Patricia de Saladín.
Requiere humildad orar todo esto, las personas orgullosas no sienten la necesidad de orar, pero cuando Dios está obrando en el corazón de sus hijos ellos comenzarán a orar de manera más bíblica. Ayer Nancy nos enseñaba acerca de cómo luce una verdadera sierva y cómo orar para que Dios haga esto una realidad en nosotras. Escuchemos la continuación de esta enseñanza.
Nancy: ¿Entonces qué significa ser una sierva del Señor? Hay muchas cosas que podríamos decir sobre esto pero quisiera destacar algunas cosas. En primer lugar, significa que reconocemos que Él es el Señor y el amo y no nosotras. Fuimos creadas para servirle, no viceversa; Él no existe para servirnos y muy a menudo en nuestra vida de oración y en nuestros deseos eso que verdaderamente se reduce lo que queremos. “Dios, ¿puedes hacer esto por mí?, ¿harías esto otro para mí? Y ¿podrías asegúrate de que ‘esto’ suceda?” y ¡No te olvides de cuidar de esto otro! Y ¡Ayúdame! Queremos que Dios nos sirva. Ahora, es genial llevar nuestras peticiones al Señor pero no nos olvidemos quién es el amo y quién es el siervo.
Ser una sierva del Señor es una relación permanente, de por vida, de libre albedrío. Es una relación arraigada en el amor y la confianza. Y tú dirás, ¿pero de dónde sacas eso? Bueno, hay un hermoso pasaje y me gustaría que pudiéramos tomar toda una sesión para esto, creo que probablemente la tuvimos en algún programa en el pasado, donde se habla en Éxodo capítulo 21 donde se habla del siervo y el esclavo. Es un concepto que no leemos que se haya cumplido en la historia, pero Dios hizo una provisión para esto y creo que era una imagen en el A.T. que apuntaba a una realidad del N.T. En Éxodo 22: 2 dice:
Si alguien compra un esclavo hebreo, este le servirá durante 6 años pero en el séptimo año recobrará su libertad sin pagar nada a cambio.
Esto es al final de 6 años y por cierto hay gran cantidad de recursos útiles por ahí acerca de lo que significaba y no significaba la esclavitud en Israel así que no te inquietes por eso, Dios nunca permitió que los sirvientes o esclavos fueran maltratados, no eran propiedad de la cual adueñarse. Se trataba de un concepto completamente diferente.
Pero al final de los seis años cuando el esclavo debía ser puesto en libertad si el esclavo decía, “yo amo a mi amo, yo no quiero ser libre”. Él estaba haciendo una elección de libre albedrío, una elección voluntaria, “¡Yo no quiero irme, yo amo a mi amo! Aquí hay una relación, mi amo me cuida, llena mis necesidades y me encanta servirle, quiero quedarme aquí y servirle por el resto de mi vida”.
Y en Éxodo 21: 5 sigue diciendo
Pero si el esclavo dice claramente (si el esclavo llega a declarar) yo no quiero cobrar mi libertad pues le tengo cariño a mi amo, a mi mujer y a mis hijos, el amo le hará comparecer ante los jueces y luego lo llevará a una puerta o al marco de una puerta y allí le horadará la oreja con un punzón. Así el esclavo se quedará de por vida con su amo.
Es una magnífica imagen de lo que significa ser siervas de Jesucristo. He orado durante años, “Señor hazme una mujer con una agujero en mi oreja”. Quiero que el mundo vea y sepa que yo soy de por vida una sierva amante de Jesucristo, porque yo amo a mi Señor, no es algo que me veo obligada a hacer, esto es algo que quiero hacer. Y es una relación de toda la vida que está enraizada en el amor y la confianza.
Ser Sus siervas significa que vamos a Él por dirección. ¿Qué hay en Su agenda para mí? ¿Qué le complacería a Él? Muchas de ustedes me han escuchado decir que mi versículo favorito de vida es lo que dijo María en Lucas 1: 28 “He aquí la sierva del Señor, que Él haga conmigo como le parezca”. Señor, ¿qué quieres que haga hoy? ¿Cuáles son tus directrices para mi vida? No lo que está en mi programa, no lo que está en mi lista de cosas por hacer, sino lo que está en Tu lista para mi día.
Ser Sus siervas significa que vivimos para Su aprobación en lugar de para la aprobación de los demás. Y Pablo dijo en Gálatas 1:10 ¿Qué busco con esto, ganarme la aprobación humana o la de Dios? Piensan que procuro agradar a los demás, si yo buscara agradar a otro, no sería siervo de Cristo. Ser un siervo de Cristo significa que estás viviendo para escuchar: ¡Bien buen siervo y fiel! Mi lenguaje del amor es palabras de afirmación, esto ha sido un don pero también ha sido una batalla en mi vida, porque tengo ansias en mi carne de escuchar ese bien hecho humano, se llama amor a la alabanza de los hombres y es una raíz perversa que te llevará a lugares problemáticos.
El temor del hombre, el amor a la alabanza del nombre trae consigo una trampa, un lazo. Como Dios ha desarraigado ese amor por la alabanza de los hombres fuera de mi vida y de mi corazón lo que Él ha hecho ha sido remplazarlo por la alanza que viene de Dios, quiero alabarlo y quiero vivir para escucharlo decirme ¡bien hecho! Así que en las largas horas nocturnas, los largos fines de semana preparándome para las sesiones y a veces cuando estoy empezando a sentir: ¿realmente esto vale la pena? Aquí está lo que me ayuda y lo que te ayudará como madre en esa etapa de la vida cuando los niños pequeños no saben cómo darte las gracias --- tienen que aprender--- pero no están levantándose y llamándote bienaventurada aún, no, en esas temporadas cuando simplemente lo hacer por amor a Cristo, por amor a los que Él te ha llamado a servir. Lo que te mantendrá en marcha, lo que me mantiene a mí en marcha, es saber que sirves a Cristo, que Él es el que va a premiar la fidelidad. Las recompensas que recibimos por la fidelidad será coronas que le devolveremos a Él, porque Él es quien servía amaba y adoraba.
Ser Sus siervas significa que somos responsables ante Él, tenemos que vivir como los que van a dar cuenta de su servicio. Él nos va a preguntar, “¿hiciste lo que te mandé a hacer?” O ¿estabas gastando tu vida corriendo y tratando de hacer todo tipo de cosas que los demás querían que hicieras? ¿Has hecho lo que te he llamado a hacer? ¡Somos responsables!
Ser Sus siervas significa que nuestro objetivo no es quedar bien sino hacer que Él se vea bien y completar fielmente lo que Él nos ha encargado a hacer. Ser una sierva de Cristo significa ser una sierva de Su Pueblo. Pablo dice en 2 Corintios 4: 5 “No nos predicamos a nosotros mismos sino a Jesucristo nuestro Señor”. Nosotros no somos más que servidores de ustedes por causa de Jesús y hay un versículo resaltado en 1 Samuel 25:41 que dice: “Ella se inclinó y postrándose rostro en tierra dijo: Soy la sierva de David y estoy para servirle, incluso estoy dispuesta a lavarle los pies a sus criados”. Este texto está hablando de Abigail y me encanta esta historia pero no voy a entrar en este versículo.
A mí no siempre me gusta vivirlo pero es lo que significa ser una sierva, Abigail dijo: “Yo soy tu sierva”.David era el rey y cualquiera querría hacer un trabajo de baja categoría para el rey pero ella dijo: Yo soy una sierva, no solo para lavarle los pies al rey sino también para lavar los pies de sus siervos. Ahora, eso es bastante bajo, eso es descender bastante. Pero ella lo consideró un privilegio y es nuestro privilegio decir: Señor soy tu esclava y estoy dispuesta y lo considero una gozosa oportunidad el lavar los pies de los siervos de mi Señor. Esa es la verdadera prueba de mi servicio. No es mi deseo de hacer algo directamente para Jesús, ¿quién de nosotras no haría eso? Es, estar dispuesta a hacer algo por los de 2 años de edad, los de 12 de años de edad o por ese adulto que está actuando como un niño de 12 años o de 2 años. Y esos otros siervos del Señor no siempre son amable, piadosos, dulces, sensibles, agradecidos pero el siervo o la sierva del Señor dice, “todavía es un privilegio porque estoy sirviendo a Cristo”.
Cuando servimos a los demás le estamos sirviendo a Él. Y hay un pasaje increíble es Lucas 12 donde Jesús dice a sus discípulos que estén siempre en disposición cuando su Señor vuelva. Que estén siempre alerta; siempre estén despiertos porque Él va a venir y tienen que estar preparados para Su regreso y Él dice en el versículo 37: “Dichosos los siervos a quienes su señor encuentre pendientes de su llegada, créanme que se ajustará la ropa --- y este es el maestro--- sus siervos vendrán a sentarse en su mesa y él mismo se pondrá a servirles”. ¡Wao, qué increíble es esto! Que Cristo, el siervo del Señor, de quien somos servidoras y cuyo regreso estamos esperando un día va a decir: “Ven a mi mesa, siéntate conmigo” “No, siéntate ahí y déjame servirte”. Eso te dejará sin aliento pero ese es el modelo, ese es el ejemplo que tenemos y entonces Apocalipsis nos dice, por toda la eternidad será nuestro privilegio y nuestro gozo servirle a Él y el Suyo servirnos a nosotros.
Escucha Apocalipsis 7:14:
Él me dijo: Aquellos son los que están saliendo de la gran tribulación, ha lavado y blanqueado sus túnicas en la sangre del Cordero, por eso están delante del trono de Dios y día y noche le sirven en su templo.
¿Qué vamos a hacer por toda la eternidad? ¡Qué alegría! Dice:
Y el que está sentado en el trono les dará refugio en su santuario, ya no sufrirán hambre ni sed, no los abatirá el sol ni ningún calor abrazador porque el Cordero que está en el trono los pastoreará y los guiará a fuentes de agua viva y Dios les enjugará toda lágrima de sus ojos.
Por favor oremos juntas. Oh Señor estamos en presencia de la increíble majestad y humildad al adorar a Cristo, el siervo del Señor, el siervo fiel del Señor, ayúdanos a servirte con alegría. Para representar cada acto de servicio como a Cristo, a aceptar gozosamente responsabilidades incluso pequeñas e insatisfactorias para tenerlas como un honor ya que es a Cristo el Señor a quien servimos y en cuyo nombre oramos, amén.
Annamarie: Nancy DeMoss de Wolgemuth estará de regreso para explorar la próxima petición en unos momentos. Si entiendes que el Señor te está confrontando con verdades de Su Palabra lo mejor sería que pares un momento y continúes orando. No esperes, pídele a Él que te muestre áreas específicas en las que necesitas crecer. Formas en las que puedes ser una mejor sierva. En cualquier momento puedes regresar a AvivaNuestrosCorazones.com para escuchar el resto del programa después.
Nancy: En esta serie de 15 días hemos estado echando un vistazo a 10 peticiones personales que he orado muchas veces a través de los años. Es raro que las ore todas las 10 peticiones en una sola oración pero son breves frases que le he rogado al Señor en varios momentos expresándole mi corazón, mis deseos y son cosas que necesito seguir pidiéndole.
Bueno, durante estas dos semanas he estado compartiendo algunas de mis meditaciones y pensamientos con ustedes y esta es una serie más bien temática, ustedes saben que me encanta tomar un libro de la Biblia y enseñarlo de principio a fin pero esta vez vamos a pedirles que busquen por varias partes de la Biblia porque es una serie temática para poder compartirles algunas de mis meditaciones personales. Las animo a que ustedes también hagan estas peticiones al Señor durante el año 2016 y para ayudarles a meditar más a fondo sobre estas peticiones, nuestros equipo ha preparado un folleto, una libreta interactiva que corresponde con esta serie, incluye versículos las Escrituras que ustedes pueden orarle directamente a Dios en cada una de estas áreas. También tiene citas, espacio para escribir sus propias ideas y algunas preguntas para hacer personal lo que aprenden.
Este paquete de peticiones personales es totalmente gratis para ti, pero si decides hacer una donación a Aviva Nuestros Corazones, te estaremos inmensamente agradecidas por tu cooperación. ¡Gracias por invertir en nuestro ministerio para que podamos seguir compartiendo este mensaje con otras mujeres alrededor del mundo!
Y a manera de repaso brevemente, hemos visto las primeras 5 peticiones: Guarda mi corazón, lléname de tu amor, lléname de tu Espíritu, que esté vestida de humildad, entonces en la última sesión consideramos una petición que va junto con la oración por un corazón humilde y es hazme una sierva. En el día de hoy tenemos otra petición que va junto con tener un corazón humilde y es dame un espíritu agradecido, una actitud de gratitud. El Catecismo de Heidelberg resume el mensaje de la Biblia en tres palabras, y me encanta este resumen de tres palabras, las tres palabras son: culpa, gracia y gratitud. Y realmente eso es el Evangelio, éramos verdaderamente culpables, merecíamos la ira de Dios y entonces Dios envió a Su Hijos, a Jesús, para redimirnos según Su gracia maravillosa. ¿Y qué produce esta gracia en nosotras? Una actitud de eterna sobreabundante e infinita gratitud. Culpa, gracia y gratitud.
Todas éramos culpables, si tú has experimentado la gracia de Dios y no tienes gratitud algo anda mal, y si has experimentado la gracia de Dios y recuerdas lo que Él ha hecho por ti en Su gracia, entonces serás una mujer agradecida. Para tener más gratitud creo que necesitamos retrocedes en el tiempo para recordar quiénes éramos cuando teníamos tanta culpa y cuál es la experiencia de tener redención por la gracia de Dios.
Mi papá, Art DeMoss ya lleva muchos años en el Cielo con el Señor, desde 1979, nunca dejó de maravillarse ante el hecho de que Dios pudo salvarlo. Dios lo salvó cuando tenía alrededor de 25 años y él había sido un hijo pródigo, había vivido una vida libertina, era una persona perdida, lejos del Señor. Así como todas nosotras antes de que Dios nos encontrara y nos salvara y nunca dejó de impresionarle, desde el día que recibió a Cristo hasta el día en que se fue al Cielo 28 años más tarde. Nunca dejó de maravillarse de que Dios le otorgó la salvación, durante toda su vida sintió una gran gratitud hacia Dios, aún en medio de algunos valles profundos y lugares oscuros. Así que cuando las personas le preguntaban cómo estás su respuesta muchas veces era: ¡Mejor de lo que merezco!
Y sé que muchas de ustedes pueden asentir ante esta declaración, así es como tenemos un espíritu agradecido, si recuerdas lo que mereces y ves lo que Dios te ha dado en Su gracia y en Su misericordia entonces siempre podrás contestar, independientemente de lo que esté pasando en tu vida: ¡Estoy mejor de lo que merezco!
El hermano de mi papá es mi tío Bob y mi tío Bob tiene casi 90 años, hace poco tiempo su esposa con quien él había estado por 64 años, mi tía Dora, se fue al Cielo a estar con el Señor. Poco tiempo de la muerte de su esposa pude ir a visitar a mi tío y tengo grabadas en mi memoria dos imágenes que fueron dos fotografías, la primera mi tío está en pie, levantando sus brazos en adoración durante el servicio memorial de su esposa y esa foto fue tomada por Robert Wolgemuth, mi esposo. Aparece en el sitio web de Aviva Nuestros Corazones. Durante el servicio memorial de mi tía mi tío Bob estaba sentado en la primera fila y yo estaba sentada algunas filas detrás de él. Estábamos cantando un himno de adoración y veía a mi tío con las manos levantadas hacia el Cielo en un momento de alabanza, él estaba adorando al Señor y dándole gracias por el don de haber conocido a esta preciosa y maravillosa mujer por 64 años. Dándole gracias al Señor en medio de la experiencia de perder a su querida esposa. La verdad es que no la perdió, él sabe dónde está, pero sufrió una pérdida en términos humanos.
Y entonces unas semanas después su hijo lo estaba visitando, y es la otra imagen, pude ver a mi tío Bob que tiene casi 90 años dando un paseo y en esta foto él estaba levantando sus manos hacia el Cielo en un día hermoso en la Florida, estaba dando un paseo y simplemente adorando al Señor y estuve con él esos días poco después del funeral y le pregunté, ¿Tío, cómo estás? Y él me contestó: “Soy tan bendecido, tuve a esta mujer tan maravillosa en mi vida por 64 años, sufrió tanto dolor en estos últimos años pero ahora está con el Señor y ya no sufre nada de dolor y no puedo dejar de darle gracias al Señor”.
No era que estuviera dándole gracias al Señor porque ella se había muerto sino ¡Gracias Señor porque me la diste y ahora ella está contigo! Y aquí podemos ver a un hombre que aprendió la actitud de gratitud.
Annamarie: Escucharemos más de Nancy DeMoss de Wolgemuth la semana que viene, mientras ella continúa enseñando esta serie de 10 peticiones personales de oración. La gratitud no nos viene fácil. Hace falta que el Espíritu Santo cambie nuestros corazones para hacernos más agradecidas. A veces luchamos con tener un corazón de gratitud cuando sentimos que Dios no nos está dando algo que queremos con desesperación. Así es como se sintió una radioescucha llamada Joanna, ella compartió con nosotros cómo Dios usó Su Palabra para cambiar su actitud.
Joanna: ¡Hola! Soy Joanna de la República Dominicana, estoy soltera y tengo casi 34 años. Hace unos años entre el 2010 y el 2012 estuve sumida en una terrible depresión. Me sentía presionada por parte de mis amistades porque casi todos ellos estaban casados o tenían una relación de noviazgo, la raíz de mi depresión era esa, había anclado mi felicidad en tener una pareja, dejando de lado lo que dice Mateo 6: 33-34 el cual dice: Más buscad primeramente el Reino de Dios y Su justicia y todas estas cosas os serán añadidas. Así que no os afanéis por el día de mañana porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Gracias a la bondad y al inmenso amor que Dios me tiene y a personas que Dios puso en mi camino pude salir de aquella terrible depresión, hoy vivo libre de ataduras y mentiras y puedo decir con toda libertad que soy una joven soltera y feliz para la gloria de Dios.
En el proceso aprendí que puedo elegir cómo sentirme y sobre todo que Dios debe ser mi único y verdadero gran amor, que mi felicidad no depende de un hombre, mi felicidad, única y exclusivamente depende de Dios.
A ti que me estás escuchado y que tal vez estés a travesando por un situación igual o similar, quiero decirte que si deseas sentirte libre, plena, satisfecha y completa, debes dejar que Dios tome el control. Busca ayuda dentro de tu iglesia en una mujer más mayor y madura a quien puedas compartirle tus luchas, refúgiate en la Palabra de Dios, búscale en oración y no dejes que el Enemigo te llene la cabeza con sus mentiras.
Ese deseo de tener pareja y casarme sigue ahí en mi corazón, no se ha desvanecido, es solo que yo decidí vivir libre de ataduras. Yo no sé, solo Dios sabe si algún me casaré pero me he propuesto que puedo sentirme feliz, plena y satisfecha como cualquier mujer casada, porque nadie me amará como Dios, solo Él es suficiente. Dios te bendiga grandemente.
Annamarie: Gracias Joanna, la Palabra de Dios no retorna vacía; hace exactamente lo que Dios quiere que haga y gracias a cada una de ustedes que apoya a Aviva Nuestros Corazones orando por el ministerio y colaborando económicamente. Este programa no existiría si no fuera por su generosidad fiel y por radioescuchas como tú. Si deseas unirte a nuestro equipo de colaboradoras por favor visita nuestra portal de internet para hacer una donación, es AvivaNuestrosCorazones.com también déjanos saber cómo Dios está usando este programa en tu vida. Puedes dejar comentarios en la página donde encuentras el programa de radio.
La próxima semana Nancy tiene mucho que enseñarnos acerca de la petición Señor, dame un espíritu agradecido junto con otras tres peticiones, que tengas un bendecido fin de semana. Espero que puedas congregarte en tu iglesia local este fin de semana y únete de nuevo a nosotras el lunes, aquí en Aviva Nuestros Corazones.
Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss de Wolgemuth es un ministerio de alcance de LifeActionMinistries.
Todas las Escrituras fueron tomadas de la Biblia de las Américas a menos que se indique otra fuente.
*Ofertas disponibles solo durante la emisión de la temporada de podcast.
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