Atrapa los intrusos
Annamarie Sauter: Mary Kassian dice que el camino que conduce a una vida desperdiciada es uno por el que nos deslizamos poco a poco.
Mary Kassian: He hablado con muchas mujeres que tienen remordimiento por cosas en su pasado. Y nunca han llegado allí de un gran salto, siempre ha sido gradual. El pecado no avanza a saltos; avanza sigilosamente. Así que para ser mujeres fuertes, debemos estar atentas a esos deslices.
Annamarie: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss Wolgemuth, en la voz de Patricia de Saladín.
La lectura de hoy de la Biblia es Deuteronomio capítulos 33 y 34. Si no comenzaste en enero, ¡no es tarde para comenzar!
Nancy DeMoss Wolgemuth: Dannah, puedo recordar que cuando era pequeña, mi papá nos hablaba a menudo sobre el poder que tiene el hábito, la importancia de desarrollar hábitos. Él decía: «Los malos hábitos son difíciles de romper y …
Annamarie Sauter: Mary Kassian dice que el camino que conduce a una vida desperdiciada es uno por el que nos deslizamos poco a poco.
Mary Kassian: He hablado con muchas mujeres que tienen remordimiento por cosas en su pasado. Y nunca han llegado allí de un gran salto, siempre ha sido gradual. El pecado no avanza a saltos; avanza sigilosamente. Así que para ser mujeres fuertes, debemos estar atentas a esos deslices.
Annamarie: Estás escuchando Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss Wolgemuth, en la voz de Patricia de Saladín.
La lectura de hoy de la Biblia es Deuteronomio capítulos 33 y 34. Si no comenzaste en enero, ¡no es tarde para comenzar!
Nancy DeMoss Wolgemuth: Dannah, puedo recordar que cuando era pequeña, mi papá nos hablaba a menudo sobre el poder que tiene el hábito, la importancia de desarrollar hábitos. Él decía: «Los malos hábitos son difíciles de romper y los buenos hábitos son en ocasiones difíciles de desarrollar».
Dannah Gresh: Eso es verdad.
Nancy: Y Él nos inculcó eso. Esta semana con nuestra invitada, estaremos hablando mucho sobre los hábitos, tanto malos como buenos. Estamos viendo lo que las Escrituras nos dicen al respecto. Te voy a poner en evidencia aquí, Dannah. ¿Tienes algún mal hábito del que te gustaría hablar, ahora para iniciar el programa?
Dannah: Bueno, Nancy, bueno, eso es...
Nancy: No tiene que ser demasiado personal.
Dannah: Bueno, la pregunta es personal. Pero Bob y yo hemos notado un mal hábito que ambos tenemos. Pasamos tanto tiempo en nuestros teléfonos que la semana pasada yo estaba en una habitación y él en la otra, y tuvimos una conversación a través mensajes de texto.
Nancy: ¡Oh, Robert y yo nunca hemos hecho eso en nuestra casa…! ¡No!
Dannah: Los dos estábamos como, «espera, esto no puede ser realmente bueno para nuestra relación». No hay contacto visual, no hay contacto físico. Así que estamos tratando de cambiar ese mal hábito...
Nancy: ...para desarrollar buenos hábitos en el matrimonio.
Dannah: Correcto. Queremos tener la buena costumbre de mirarnos a los ojos.
Nancy: Bueno, los hábitos no tienen que ser malos. Pueden ser buenos. De hecho, estoy realmente agradecida por algunos de los buenos hábitos de Robert. Es ordenado, planifica por adelantado, todo lo que necesita para su rutina matutina, su café, su tiempo de quietud, está preparado la noche anterior.
Yo soy mucho más casual y desorganizada. Entonces, algunos de sus buenos hábitos realmente están exponiendo algunos de mis malos hábitos, aunque él no me los señala. Pero puedo ver y tengo el desafío de adoptar algunos de sus buenos hábitos.
Dannah: Sé que quiero estar cerca de alguien con buenos hábitos. Y pienso, «quiero ser así, hablar así, actuar así. Quiero tomar decisiones de esa manera». Así que es bueno que tengamos a Mary Kassian con nosotras esta semana, porque probablemente pueda ayudarnos a desarrollar algunos buenos hábitos como mujeres. Ella ha escrito un nuevo libro titulado, «La verdadera fortaleza».
Nancy: Y el subtítulo tiene que ver con hábitos que ella ha extraído de la Palabra de Dios. Nos habla de «Hábitos sorprendentemente sencillos de una mujer espiritualmente fuerte». Hay muchas cosas que desmenuzar, y lo vamos a hacer. Pero Mary, queremos darte la bienvenida de nuevo a Aviva Nuestros Corazones. No eres desconocida para nosotras, y estamos muy contentas de que hoy estés aquí con Dannah y conmigo en el estudio.
Mary: Me alegro de estar aquí también.
Nancy: Mary, has tenido un papel tan importante en el desarrollo y el crecimiento de este ministerio y de este mensaje. De hecho, recuerdo que fue alrededor de mi cumpleaños cuarenta, cuando leí un libro que habías escrito, que me ayudó a comprender históricamente de dónde venimos como mujeres y algunas de las formas de pensar que se han infiltrado en nuestras vidas como cristianas. Fue al leer ese libro que nació el concepto y la carga por el movimiento Mujer Verdadera. Y con los años hemos conversado y soñado juntas.
Dannah: ¿Eso convertiría a Mary en la partera? No lo sé.
Nancy: Sí, exactamente.
Mary: O la abuela.
Nancy: ...de Aviva Nuestros Corazones, porque en realidad esta es una hermandad. Este último libro que has escrito es tan poderoso, bien organizado y redarguye, da convicción. Es bíblico, claro, y trae mucha convicción.
Dannah: Así es.
Nancy: ¿Qué más puedo decir?
Dannah: Para mí fue especialmente confrontador cuando hablamos sobre este tema de los hábitos: buenos y malos. Nancy, estoy pensando que tal vez haya alguien que sepa si Mary tiene buenos hábitos o malos hábitos. ¿Sabes en quién estoy pensando?
Nancy: ¿Es un él?
Dannah: Es un él.
Nancy: ¿Su nombre comienza con una «B»?
Dannah: Sí.
Nancy: ¿Y tiene el mismo apellido que Mary?
Dannah: Sí, y podría tenerlo al teléfono ahora mismo.
Mary: ¡Oh no!
Nancy: Brent, ¿estás ahí?
Brent Kassian: Buenos días.
Mary: ¡Buenos días cariño!
Dannah: Hola Brent, hoy estamos hablando de la verdadera fortaleza de la mujer, y tu esposa es una mujer fuerte, ¿verdad?
Brent: Sí, lo es. Ella es muy, muy fuerte; y comienza con la fuerza de su carácter. La gente a menudo me pregunta: «Mary ha escrito mucho, ha viajado mucho y ha impactado a muchas mujeres, creo que a algunos hombres en el camino también». Y ellos dicen, «bueno, ¿y cómo hace eso?»
Yo diría que ella tiene un corazón para Dios y que lo ama y lo busca. Ella es muy enseñable y deja que el Señor le enseñe y le guíe. Esa es la base fundamental de donde proviene su fuerza.
Algunas de las cosas que surgen de ahí son su capacidad para enfocarse en la tarea que tiene por delante y llevarla a cabo de principio a fin. Ella se enfoca mucho en terminar las cosas que tiene por hacer. Así que definitivamente esa es una fortaleza.
Podría ser una gran tarea como escribir un libro, hablar en conferencias u orar o ministrarle a alguien. Pueden ser solo algunas tareas prácticas como atender su jardín cuando el clima lo permite.
Dannah: Parece que ella te gusta Brent, la quieres mucho.
Nancy: Los he visto juntos, y sé que eso es verdad.
Dannah: Sí, es cierto.
Brent: Eso es muy cierto; verdaderamente la amo.
Dannah: La última pregunta que tengo para ti Brent... Estamos hablando de hábitos. Nancy me hizo confesar uno de mis malos hábitos en el micrófono, aquí ahora. No voy a preguntarte si Mary tiene malos hábitos, pero ¿puedes nombrar uno o dos hábitos sencillos que creas que son realmente formativos que la ayudan a ser la clase correcta de mujer fuerte?
Brent: Un hábito es estar en la Palabra de Dios. Ella permanece en la Palabra de Dios. Ella la lee, piensa en ella, medita en ella, ella la canta y la ama. Entonces, yo diría que ese es un hábito que es tremendo y fundamental. A eso, le añadimos que ella busca escuchar la voz de Dios—Su guía, a través del Espíritu Santo para aplicar la Palabra en diferentes circunstancias.
Una y otra vez veo esos dos hábitos en nuestra relación... Ya sabes cómo funcionan. Cuando necesito que me llamen la atención o debo hacer algún ajuste, el Señor la usa para hacerlo. Ella me dice algo como, «¿por qué no lo miras de esta manera, cariño? Tal vez debes ser un poco más paciente aquí con esta situación».
Y bueno, estos son solo un par de hábitos prácticos y espirituales que veo en su día a día.
Dannah: Oh, ¡eso es hermoso! ¿Sabes lo que estoy pensando también? Incluso eso me habló sobre la forma en que le hablo a Bob, mi esposo. Cuando confrontas a Brent, Mary, se nota que como parte de tu fortaleza, lo haces con ternura.
Nancy: Así es.
Dannah: ¡Qué hermoso es eso! Brent, gracias por amar tanto a esta mujer y por compartirla con nosotros tan a menudo.
Brent: Muchas gracias y que tengan un buen día.
Nancy: Gracias Brent.
Brent: Dios las bendiga.
Dannah: Entonces Mary, ayer hablamos sobre identificar los hábitos sencillos de una mujer espiritualmente fuerte. Hoy queremos traer a nuestros corazones ese primer hábito que se encuentra en 2 Timoteo 3:6–7. Creo que nunca podemos leer demasiado la Palabra de Dios, así que Nancy, ¿podrías recordarnos lo que dice?
Nancy: Sí, Pablo está hablando de los últimos días. Pero los que vivimos hoy, en general, son los últimos días. Habla sobre la impiedad, las cosas que entran en la cultura.
Las personas son arrogantes y orgullosas y amadoras de sí mismas. No es el tipo de características que quieres tener. Él dice que estas personas tienen apariencia de piedad, y podrían estar en la iglesia. Pueden parecer realmente piadosos, pero niegan el verdadero poder. No tienen el verdadero evangelio. Él dice que «evitemos a esas personas».
Entonces, ¿qué tipo de personas se supone que debemos evitar? Pablo dice que «entre ellos están los que entran en los hogares y capturan mujeres débiles, cargadas de pecados y extraviadas por diversas pasiones. Siempre están aprendiendo y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad» (vv. 6-7).
Así que hemos hablado de esas mujeres que no poseen la clase correcta de fortaleza. Ellas pueden pensar que son fuertes. Pueden ser impresionantes de acuerdo a lo que el mundo valora o evalúa como impresionante. Pero, de hecho, dice que son mujeres pequeñas (mujercillas), que son débiles. Una traducción dice, «de voluntad débil», crédulo. No son espiritualmente fuertes.
Mary: Son menos de lo que podrían ser debido a sus hábitos. Y el primer hábito que vemos en este pasaje es que toleraban a los «trepadores» o intrusos. Permitían que esos falsos maestros se treparan a sus hogares. El término es realmente interesante «trepar». Porque no significa que simplemente abrieron la puerta y ellas dijeron: «Oye, entra». Significa que estas ideas de estos falsos maestros entraron poco a poco, solo avanzaron un poco, un poco más y un poco más.
Nancy: Y estos falsos maestros se meten en las casas de estas mujeres débiles (mujercillas), y estas ni siquiera se dan cuenta (y a veces los hombres tampoco) de lo que está sucediendo. Si un ladrón o alguien que quisiera hacerle daño a tu familia llegara, tumbara la puerta y entrara gritando, te resistirías.
Mary: Sí.
Nancy: Dirías: «¡Fuera de aquí!» Llamarías a la policía. Tomarías medidas. Pero esto aquí es como una intrusión sutil.
Dannah: Muy sutil.
Mary: Ni siquiera sabes lo que está pasando, y por eso lo toleras. Creo que muchas mujeres tienen la costumbre de dejar que estas ideas se trepen en sus vidas—influencias impías, no solo personas, falsos maestros, sino también cosas como hábitos impíos, actitudes, posturas inmorales o ideas impías. Hay todo tipo de intrusos que las mujeres permiten que entren en sus vidas y en sus corazones.
Nancy: Entonces, el primer buen hábito que necesitamos desarrollar es estar atentas a estas ideas que se trepan a nuestras vidas.
Mary: Así es, para atraparlas.
Dannah: Sabes Mary, cuando conocí todo este concepto a través de tus enseñanzas, vi algo en mi vida que se estaba infiltrando en mi espíritu, en mi mente, en mi teología y en mis hábitos. Realmente me dio convicción. Hablas también de aquellas cosas que nos roban el tiempo. ¿Cuáles son estas?
Mary: Los ladrones de tiempo pueden ser la pérdida de tiempo en cosas que no son productivas. Todos necesitamos tiempo para descansar, pero creo que particularmente hoy en día con las redes sociales y ...
Nancy: Espera, detente ahí.
Dannah: Ahí es donde me atrapaste, porque ¿cuánto tiempo crees que la mujer promedio pasa en las redes sociales?
Mary: Bueno, se realizó un estudio que decía que para cuando llegues al final de tu vida, habrás pasado un mínimo de siete años en las redes sociales.
Nancy: Creo que la palabra «mínimo» es la palabra importante allí. De hecho, nuestros teléfonos tienen esta aplicacion ahora en la que creo que cada semana aparece cuántas horas al día has dedicado a ciertas aplicaciones. La primera vez que apareció en el mío, dije: «¡De ninguna manera! ¡Esto no puede ser correcto!»
Mary: Eso no puede ser correcto.
Nancy: ¡Esto no puede ser! Ahora, estoy haciendo muchas cosas adicionales como estudiar. A veces estoy leyendo la Escritura, pero muchas veces permito que otras cosas me roben el tiempo.
Dannah: ¿Te está ayudando a ver cuánto tiempo pasas en el teléfono? ¿Te hace más consciente?
Nancy: Bueno, tengo que hacer algo al respecto.
Dannah: Sí.
Nancy: Me está haciendo más consciente, pero luego tengo que hacer algo al respecto. Tengo que decir: «Está bien, hay algunos buenos usos para esto. Hay algunas cosas buenas que estoy haciendo con mi tiempo aquí que son productivas, útiles y edificantes. Pero eso no es todo. Hay cosas que tal vez son solo recreativas que mantienen tu mente concentrada».
Dannah: Como un juego de palabras de múltiples jugadores que algunas hemos jugado.
Nancy: Sí, he pasado menos tiempo en eso en estos días. Y también está el desplazarse interminablemente viendo lo que todas las demás personas están haciendo. Tal vez eso no sea necesariamente malo, o en sí mismo pecaminoso, pero estamos permitiendo que ciertas actitudes se trepen a nuestros pensamientos, sea comparándonos o asumiendo ideas de lo que es la belleza.
Dannah: Y ni hablar de lo sarcástico que se puede ser en las redes sociales. Creo que este es un problema realmente grande, y así son los «trepadores» o intrusos. Parecen insignificantes. Y estaba pensando el otro día… hace diez años yo lograba hacer muchas cosas en una semana, ¿por qué? Bueno, hace diez años no tenía un teléfono en la mano. No tenía un teléfono inteligente convirtiéndome en una tonta.
Realmente, Mary, solo tengo que decir que leer este capítulo provocó un gran cambio en mi vida. Me di cuenta de que había estado diciendo: «Señor, ¿por qué soy menos productiva? ¿Me puedes mostrar por qué soy menos productiva? ¿Será que me estoy haciendo mayor? ¿Se está desacelerando mi cerebro? ¿Se está desacelerando mi cuerpo?»
Por medio de este capítulo me di cuenta de que eso tiene que ver con cómo administro mi tiempo. Cuando me acuesto y cuando me levanto por la mañana, cómo uso este teléfono. En las pocas semanas que he estado obedeciendo al Señor y dándole ese tiempo y siendo consciente de los intrusos, ¡mi productividad ha vuelto!
Mary: Sí.
Dannah: ¡Y Es divertido! ¡Hay gozo! ¡Se siente genial! Así que deja tu teléfono, vete a la cama temprano, levántate temprano. Son cosas sencillas, ¿verdad?
Mary: Cuando hablo con mujeres que se han metido en grandes problemas, tal vez tuvieron una aventura o se metieron en una relación que no es saludable, nunca han llegado allí de un gran salto.Siempre ha sido gradual. Siempre ha sido poco a poco.
Y terminan diciendo: «¿Cómo llegué aquí?» Bueno, la cuestión es que el pecado no avanza a pasos agigantados, sino que avanza sigilosamente, solo un poquito a la vez. Así es como nos metemos en problemas, cuando hacemos el hábito de estar distraídas y no nos cuidamos de los intrusos que traen esos deslices. Entonces, para ser mujeres fuertes, debemos estar atentas.
Nancy: Y mencionamos uno de ellos, hablamos de cómo nos roban el tiempo. Pero, ¿cuáles son algunos otros intrusos? Pueden ser personas.
Mary: Pueden ser personas que entran en nuestras vidas que son influencias negativas, que nos alejan de la Palabra de Dios. Pueden ser ideas, intrusos ideológicos o morales con los que nuestros estándares comienzan a cambiar un poco. Pienso en esto a menudo. Tuve convicción de esto una vez en términos de: ¿Estoy tolerando ver algo en la televisión ahora que no habría visto hace cinco años? ¿Lo habría visto hace diez años?
Es algo que estoy tolerando, pero esa no es realmente la dirección hacia la que Dios quiere que vaya en términos de lo que estoy pensando o para mantener mi mente limpia y pura.
Nancy: Creo que también pueden ser actitudes.
Mary: Sí, pueden ser actitudes.
Nancy: Pueden ser cosas a las que comenzamos a darles vueltas en nuestras mentes, la falta de perdón o el resentimiento, y vas dejando que eso eche raíces.
Dannah: ¿No crees que ese es un gran problema de actitud que tenemos ahora? La negatividad.
Mary: La negatividad y la crítica. Tener un espíritu crítico hacia los demás. Eso es lo que a menudo aparece en las redes sociales.
Nancy: De repente ves un matrimonio que se está destruyendo, se está desmoronando. Bueno, no se estaba desmoronando cuando estaban en el altar, entonces, ¿qué pasó? Dejaron entrar actitudes que no valoraban al otro, y no hablaban bien del otro.
Mary: Sí.
Nancy: A menudo hablamos en este ministerio sobre el Reto de 30 días de alentar al esposo. No es que este sea una salvación milagrosa para tu matrimonio en sí mismo. Pero lo que hace es detener ese intruso de la crítica.
Mary: Eso es exactamente lo que hace.
Dannah: Me recuerda algo que hice con Bob. Ok, yo amo mucho a mi esposo.
Nancy: Eso es verdad.
Dannah: Estoy muy enamorada de él, pero él deja sus calcetines en el centro del piso de la sala... y lo ha hecho a lo largo de nuestro matrimonio. Hemos tenido conversaciones al respecto. Hace años decidí que los recogería, pero ¿sabes qué? Cada vez que lo hacía, volteaba los ojos. Nadie me veía, no hacía ningún sonido. No me quejé con Bob. Dejé de hablar de sus calcetines. Dejé de quejarme verbalmente con él. Pero mis ojos y mi corazón seguían quejándose. Y eso estaba teniendo un gran impacto sobre la manera en que me relacionaba, con mi lenguaje no verbal.
La actitud de tu corazón importa: voltear los ojos, la manera como miras a alguien, importa y cambia la forma en que piensas y sientes acerca de los demás.
Mary: Y una mujer fuerte necesita reconocer eso. Es un hábito pequeño, algo que hacemos todo el tiempo, y hay que estar alerta a esos intrusos y atraparlos cuando los vemos. Y recibir lo que traiga la Palabra de Dios y aceptar Su corrección.
Dannah: Entonces, Mary, ¿podríamos buscar 1 Pedro 5:8–9? Creo que este pasaje nos da algunas ideas, algunas pistas sobre cómo ponerle límites a estos intrusos.
Nancy: Me gusta eso, «ponerles límites a estos intrusos». Dominarlos, deshacernos de ellos, identificarlos, y este pasaje realmente habla de eso.
Mary: Dice: «Sed de espíritu sobrio, estad alerta. Vuestro adversario, el diablo, anda al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar». Esa imagen allí, «al acecho»—sabes que los leones no atacan a matar de inmediato. Se toman su tiempo. Son muy pacientes. Ellos dan vueltas y vueltas.
Nancy: Y este adversario es el más peligroso de todos—Satanás.
Mary: ¡Así es! Satanás mismo está buscando a alguien a quien devorar.
Nancy: Pero se supone que debemos estar alerta.
Mary: Sí, tener cuidado con él. Tenemos que permanecer alerta. Aquí dice: «resístelo». Entonces, primero dice que debes estar alerta, mantente en guardia, cuídate de los intrusos. Debes saber que Satanás es el que viene poco a poco y simplemente destruye tus defensas, pone resistencia contra tu moral, pone resistencia contra tus ideas. Así es como él influenció a Eva en el jardín.
Nancy: Exactamente.
Mary: No fue un ataque abierto. Fue muy sutil, muy gradual, progresivo. Así que primero vigilamos. Resiste firme en tu fe. Creo que tenemos algunas instrucciones realmente claras aquí. En primer lugar, tener una mente sobria, en otras palabras, tomar esto en serio. Creo que muchas mujeres no toman en serio la amenaza de estos intrusos. Dirían: «Bueno, es solo una conversación casual. Solo le estoy enviando mensajes de texto a este hombre». «Es solo una comida que estamos teniendo juntos; no es la gran cosa».
Dannah: «Es solo la televisión» o «es solo una grosería en este programa».
Mary: «Todos están viendo esto».
Dannah: «Todo el mundo lo dice».
Mary: «¿Cuál es el problema?» «Soy lo suficientemente fuerte como para manejarlo».
Nancy: «Solo me estoy relajando cuando miro eternamente las redes sociales. ¿Qué de malo tiene esto?»
Mary: Exactamente, ¿qué de malo tiene esto? No es nada malo, y realmente no es gran cosa, es algo insignificante. Pero tienes que ser sobria y tomar esas pequeñas cosas en serio. Sobrio significa ser serio acerca de algo, y creo que significa que debemos tomar en serio la forma en que Satanás se mete en nuestras vidas. Toma en serio su estrategia, porque su estrategia principal es avanzar lentamente. Tiene mucho tiempo; él es paciente.
Nancy: Pero tiene la intención de derribarte.
Mary: Él intenta derribarte y provocarte. Y es implacable. Él viene a ti todo el tiempo.
Nancy: Luego miramos atrás y vemos que nuestras vidas se han desmoronado, y son un desastre, y estamos abrumadas y deprimidas, y las relaciones se desmoronan. Y pensamos, ¿cómo sucedió esto? Bueno, no fuimos sobrias cuando estos intrusos se metieron en nuestras vidas.
Mary: Sí, no teníamos una mente sobria; no lo tomamos en serio. Luego dice, «estad alerta». Una de las palabras que es realmente interesante en nuestro pasaje en 2 Timoteo es que se metieron en los hogares. Creo que, como mujeres, necesitamos estar atentas no solo a nosotras mismas, sino también a las cosas que se están infiltrando en nuestros hogares.
Necesitamos resistir. La siguiente palabra en este pasaje dice, «resistirlo». Tenemos que resistir lo que está pasando. Necesitamos resistir. Tal vez necesitamos poner algunos filtros en el Internet, vigilar el tiempo. A veces necesitamos decir: «No, este es un programa de televisión que no estará en mi casa. Este es un videojuego que no voy a permitir que mis hijos jueguen».
Nancy: Y a los que no nos resistamos, al final nos van a controlar.
Mary: Es correcto.
Dannah: Sí.
Nancy: Nos van a controlar a nosotras y a las personas que amamos.
Mary: Porque seguirán avanzando, porque esa es su naturaleza. Y lo que pasa es que nos llevan a la impiedad. Hay una lista completa en 2 Timoteo capítulo 3, de impiedad en los últimos tiempos. Si nos descuidamos, nos empujarán a estar menos centradas en Dios, más centradas en nosotras mismas. Nuestras ideas comenzarán a cambiar; nuestros corazones comenzarán a cambiar; nuestras actitudes comenzarán a cambiar. Al final lo que quieren es alejarnos del Señor.
Nancy: Bueno, vamos a seguir hablando sobre algunos de estos hábitos que son tan destructivos y de los hábitos sorprendentemente sencillos que nos ayudan a ser mujeres espiritualmente fuertes. Y creo que aún hay mucho más que podríamos decir acerca de este que hemos visto hoy.
Mary: Sí.
Nancy: Dannah, has compartido de manera transparente. Mary y yo podríamos identificar cosas que están en nuestras propias vidas en las que dejamos entrar los intrusos fácilmente. Entonces, mis preguntas para ti que nos escuchas hoy son: ¿Hay intrusos, actitudes, valores, entretenimiento, personas, que tengan una influencia poco saludable, a los que les has permitido introducirse en tu vida? ¿Eres sobria al respecto? ¿Estás resistiendo al enemigo? ¿O simplemente dejas que te atropelle?
Dannah: Así es. Si sientes que tal vez hay algunos intrusos en tu vida y necesitas ayuda con eso, nos gustaría que adquieras el libro, «La verdadera fortaleza: Hábitos sorprendentemente sencillos de una mujer espiritualmente fuerte». También, acércate a una mujer madura en la fe que pueda guiarte a la verdad de Dios.
Si vas a la Conferencia Mujer Verdadera a celebrarse en tan solo unos días, puedes adquirir el libro en el área de recursos. Más adelante podrán también informarse de su disponibilidad en nuestra tienda en línea, en AvivaNuestrosCorazones.com.
Nancy: ¿Alguna vez, al ver los resultados de una decisión que tomaste, has pensado: «¿Qué estaba pensando? ¿Cómo pude haber hecho eso?» Bueno, mañana Mary compartirá con nosotras cómo evitar experimentar eso. Únete a nosotras para explorar el segundo de siete hábitos sorprendentemente sencillos de mujeres espiritualmente fuertes. Te esperamos aquí en Aviva Nuestros Corazones.
Annamarie: Creciendo en verdadera fortaleza juntas, Aviva Nuestros Corazones con Nancy DeMoss Wolgemuth es un ministerio de alcance de Life Action Ministries.
Todas las Escrituras son tomadas de la Biblia de Las Américas, a menos que se indique lo contrario.
Mi esperanza está en Jesús, Jonathan & Sarah Jerez, Periscopio ℗ 2017 Jonathan & Sarah Jerez.
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