Nancy DeMoss Wolgemuth: Pensemos cuántas cosas asombrosas ocurrieron en la primera Navidad:
-
El Dios que abre la matriz, para dar el regalo de los hijos, se convirtió en un niño que crecía en el vientre de una mujer.
-
Aquel de quien dependemos para todo, se hizo dependiente de Sus padres humanos.
-
Aquel que sostiene el universo con Sus manos, fue sostenido en los brazos de María.
-
El que creó la primera mujer, nació de una mujer.
-
El Anciano de Días se convirtió en un recién nacido.
-
El Ayudador se volvió un bebé indefenso.
-
El Creador se hizo criatura.
El Salmo 29:4 nos dice que la voz del Señor es poderosa, y majestuosa. Esa voz poderosa y majestuosa se redujo al llanto de un bebé.
Si te detienes a pensarlo, la Navidad es sorprendente. Este Dios Encarnado merece nuestra gratitud y adoración.
Ayúdanos a llegar a otras
Como ministerio nos esforzamos por hacer publicaciones de calidad que te ayuden a caminar con Cristo. Si hoy la autora te ha ayudado o motivado, ¿considerarías hacer una donación para apoyar nuestro blog de Mujer Verdadera?
Donar $3
Únete a la conversación