¿Dónde te encontrabas cuando te enteraste de la noticia sobre la Reina Isabel II?
- ¿Sentada en tu cubículo?
- ¿Parada en la fila de Starbucks?
- ¿Comiendo en tu salón de clase?
- ¿En el parque del vecindario con tus hijos?
Tal vez miraste hacia abajo y viste la notificación de la noticia. Tal vez escuchaste las palabras cuando una amiga las leyó en voz alta: «La reina Isabel II ha fallecido en paz en Balmoral esta tarde»
En una década anterior, si hubieras estado viendo la televisión en el momento en que se produjo la noticia, la pantalla habría cambiado a estática mientras el programa pasaba a una sesión informativa. El presentador se habría acomodado la corbata, diciendo: «Interrumpimos la programación habitual para ofrecerles esta noticia de última hora». Y habrías recordado dónde estabas y con quién estabas. Esa noticia hubiera quedado plasmada en los detalles de ese momento, uno que jamás olvidarías.
La noticia del fallecimiento de la reina fue una marca en la línea de tiempo de la historia en nuestra vida, pero no fue personal. No cambió la trayectoria de tu historia. Pero espero que otro anuncio real lo haya hecho.
Una declaración real
Interrumpimos la programación habitual del blog con este anuncio especial: El cielo gobierna. Hace algunas semanas, mujeres de todo el mundo se han reunido en Indianápolis y en grupos y por internet, no porque haya muerto un monarca, sino porque el Rey Jesús vive.
«¡Aleluya! Porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina». -Apocalipsis 19:6
«Y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin». -Lucas 1:33
En los pasillos del Centro de Convenciones de Indiana, se colocaron carteles de color púrpura a lo largo de las paredes, declarando el reinado del Rey Jesús. Cuando estos carteles salieron de la sede de Revive Our Hearts en Michigan, estaban en blanco, solamente con las palabras «El cielo gobierna... ¡lo creo!» impresas en la parte superior. A lo largo de la conferencia, a medida que las mujeres pasaban junto al cartel, firmaban con su nombre para afirmar la soberanía de Cristo sobre sus circunstancias.
Si te detuvieras frente al cartel para leer algunas de las declaraciones que las mujeres han escrito este fin de semana, esto es lo que verías:
- El cielo gobierna sobre mis amigas no salvas.
- El cielo gobierna en la salvación de mi esposo.
- El cielo gobierna sobre mi hogar tóxico.
- El cielo gobierna sobre mi hijo pródigo.
- El cielo gobierna sobre mi hermana que está muriendo.
- El cielo gobierna en mi soltería.
- El cielo gobierna en mi sufrimiento.
- El cielo gobierna sobre mis finanzas.
- El cielo gobierna sobre mis miedos.
- El cielo gobierna en mi futuro.
¿Qué habrías escrito tú? Es posible que no hayas tenido la oportunidad de tomar un Sharpie y escribir en el cartel, pero ¿dónde ha grabado Dios esas dos palabras con tinta permanente en tu corazón?
En el último mensaje de Mujer Verdadera '22, Nancy DeMoss Wolgemuth describió situaciones en las que parecía que no había forma posible de que llegara la victoria, momentos oscuros en los que el diablo gritaba «¡Jaque mate!» por la devastación que había causado. En cada uno de esos escenarios aparentemente sin esperanza, el Rey aún tenía un movimiento más.
Jesús siempre tendrá un movimiento más, y un día, Apocalipsis 19:11-21 se cumplirá. El Cordero vencerá (Apocalipsis 12:11), y el Rey de reyes reinará para siempre.
En los últimos minutos de su mensaje, Nancy dijo:
Todavía estamos en la batalla, pero no olvides que el resultado ya está determinado. . .
No te dejes llevar por el desánimo, el miedo o el pánico. El diablo puede vencer a los santos con el permiso de Dios durante un tiempo, pero no puede vencer al Cordero. Así que, ¡anímate! Cristo ha vencido, y Él te dará la gracia para permanecer hasta el final.
Hoy, sí crees en esas palabras, únete al poderoso coro y adora al Cordero:
El Rey está vivo, y el Cielo gobierna.
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