La luz al final del túnel

“Si el Señor no hubiera sido mi socorro, pronto habría habitado mi alma en el lugar del silencio…” Sal. 94:17

Cinco meses después de dar a luz, el Señor me permitió pasar por una etapa muy difícil—la lucha contra la depresión post-parto. En el momento no sabía lo que me estaba pasando. No entender el proceso en que me encontraba me angustiaba aún más. No había lidiado anteriormente con tentaciones relacionadas a mis hormonas y cambios físicos en mi cuerpo. Debo confesar que me tomó de sorpresa y desprevenida. Por eso quiero compartir este testimonio esperando que quizás el Señor lo use para ser de bendición a alguna mujer que esté pasando por una situación similar.

Cuando mi cuerpo comenzó a regularizarse hormonalmente, pasé por meses muy oscuros espiritualmente. Estaba llena de temores y ansiedad. Por momentos, la capacidad de pensar claramente disminuyó considerablemente y los dardos del maligno aumentaron. Tuve pensamientos tan oscuros y faltos de esperanza, que me sentía paralizada por el temor de hacer algo irracional. Recuerdo días donde no veía luz al final del túnel, pensaba que me sentiría  desesperanzada por el resto de mi vida y que no sobreviviría la maternidad. Estaba llena de dudas acerca de Dios y de mi fe. No podía distinguir entre la tentación al temor y el temor mismo. Llegué incluso a experimentar ataques de pánico.

“…Si digo: mi pie ha resbalado, Tu misericordia, oh Señor, me sostendrá…” Sal.94:18

El Señor conoce la debilidad que sus hijos necesitan y por cuánto tiempo. Leer la historia de Jesús sobre la tormenta en Marcos 4: 35-39 fue de gran consuelo para mí en ese momento. Pues pude entender que Él estaba reinando sobre esta tormenta en mi vida. El no permitiría que me destruyera. Él iba a decir: “Calma!” cuando esa aflicción cumpliera Su propósito en mí. En ese sentido, creer y confiar en la Soberanía de Dios fue muy dulce: Jesús ES Rey! Su amor fiel ordenó la tempestad en mi corazón. En Su tiempo y a Su modo, El daría la orden para que cesara.

“…Cuando mis inquietudes se multiplican dentro de mí, Tus consuelos deleitan mi alma” Salmo 94: 19.

A raíz de esa aflicción, comprobé  que la verdad de Dios es siempre verdad aunque mis sentimientos y temores me amenacen y digan otra cosa. A menudo mis temores parecían más reales que las promesas de Dios. Uno de los versículos clave en esos meses fue: “¿A quién más iremos? Solo Tú tienes Palabras de vida eterna!!” (Juan 6: 68). Descansar en mi percepción de la realidad era una necedad. Solo podía ir a Él para encontrar vida.

Hermana, no sé por cuál situación estás pasando ahora mismo. Quizás estás lidiando con una enfermedad crónica. Quizás tienes un hijo rebelde o un matrimonio difícil. Si eres hija del Rey de Reyes, puedes descansar en que El reina y controla cada detalle para darte algo a través de esta aflicción mucho más valioso que todo lo que estás perdiendo a través de la misma. El regalo de conocer mejor a Jesús y Su suficiencia en la aflicción es más precioso que la vida misma.

Para meditar: ¿Qué te están diciendo tus temores? ¿Cuál promesa de las Escrituras los contrarresta? ¿Cuál mentira te sientes tentada a creer? ¿En cuál verdad específica te puedes regocijar?

----¡Déjanos tu comentario y únete a la conversación!----

Este artículo procede del Ministerio Aviva Nuestros Corazones ® www.avivanuestroscorazones.com

El material publicado en esta página se encuentra disponible para ser compartido gratuitamente, en cuyo caso, agradecemos su integridad  al citar la fuente en respeto a nuestros derechos de autor. Queda prohibida toda reproducción con fines comerciales.

Ayúdanos a llegar a otras

Como ministerio nos esforzamos por hacer publicaciones de calidad que te ayuden a caminar con Cristo. Si hoy la autora te ha ayudado o motivado, ¿considerarías hacer una donación para apoyar nuestro blog de Mujer Verdadera?

Donar $3

Sobre el autor

Aylín Michelén de Merck

Aylín Michelén de Merck es esposa y mamá de tres hijos. Vive con su familia en el Medio Oriente. Aylín disfruta el guacamole, el café con leche de menta y todas las cosas que incluyen chocolate. La característica más importante … leer más …


Únete a la conversación