«El Titanic se hunde cuatro horas después de chocar con un iceberg»
«¡EN LA LUNA! Y es un paso gigante para la humanidad»
«La Princesa Diana muere»
Todos estos titulares fueron noticias de último momento algún día, pero ahora solo son… noticias viejas . El evangelio no es muy diferente para la mayoría de los cristianos. No sé tú, pero la mayor parte de mi vida consideré que el Evangelio era nuevas noticias para los incrédulos pero viejas noticias para los creyentes.
Estaba muy equivocada.
Noticia de ultima hora: ¡El evangelio no es solamente para tus vecinos perdidos!
El evangelio también es para ti, creyente.
Pero no me creas solo a mí. Vamos directo a la fuente. Por ejemplo, en Romanos 16:25, Pablo les escribe a los creyentes,
«Y a aquel que es poderoso para afirmaros conforme a mi evangelio y a la predicación de Jesucristo…»
¿Viste eso? Es el evangelio que nos fortalece como creyentes. No libros con instrucciones o más educación sino la historia simple, familiar, de la muerte y la resurrección de Jesucristo por nosotros.
Aquí hay otro versículo, escrito para los creyentes, que nos dice que el evangelio no es solamente para nuestros vecinos perdidos:
«El evangelio está dando fruto constantemente y creciendo también en vosotros desde el día que oísteis y comprendisteis la gracia de Dios en verdad» (Col. 1:6).
Te importa si pregunto… ¿Está el evangelio dando fruto y creciendo en ti? (Consejo: Si no estas volviendo a las verdades de el evangelio regularmente, probablemente no lo está haciendo.)
Me gusta como lo pone Tim Keller, «El Evangelio no es solo el ABC sino el A-Z de la vida cristiana.»
Recordándonos el evangelio
El evangelio tiene que cambiar todo en nuestras vidas. Todo. Pablo entendió esto, por eso les recordó a los cristianos de Corinto el evangelio una y otra vez:
«Ahora os hago saber, hermanos, el evangelio que os prediqué». (1 Cor. 15:1)
También debemos recordar el evangelio diariamente. Marci Preheim dice:
«Los Cristianos no superan el evangelio. Nunca llegan a un nivel de virtud y luego escriben libros con instrucciones para ayudar a las personas que no han llegado a ese punto. Nunca lo dejaremos de necesitar. Y añadiría, nunca superaremos nuestra necesidad por el evangelio.»
Recibiendo el evangelio
Pablo continua,
«Ahora os hago saber, hermanos, el evangelio que os prediqué, el cual también recibisteis.»
Cuando escuchamos el evangelio treinta mil veces, en vez de suspirar y decir, He escuchado esto antes, ¿por qué no puedes escribir un blog más práctico? y quitar el blog, necesitamos escuchar y recibir con alegría el evangelio cada vez que lo escuchamos.
Me tope con un «post» en la blogosfera de un hombre llamado Dane Ortlund y me ayudo bastante. Este es el resumen:
«En el nivel más fundamental, soy un ‘creyente’ irreversible por el resto de mi vida, por la gracia de Dios. Pero a otro nivel voy de creyente a incrédulo (de ejercer la fe en Cristo a abandonar la fe en Cristo) docenas de veces, hasta cientos de veces, diariamente.
A un nivel doctrinal vemos a Cristo con una permanencia sostenida y consistente. Pero en nuestra experiencia diaria seguimos dudando, seguimos alejándonos de Cristo y buscando otros salvadores, incluso salvadores cristianos como memorizar la escritura o el servicio en la iglesia.»
¡Ay! No sé ti pero eso me duele porque es muy cierto. Necesitamos creer y recibir el evangelio.
Pablo sabía que nada es más importante que el evangelio:
«Yo os entregué en primer lugar lo mismo que recibí». (1 Cor. 15:3)
Desempolvando el evangelio diariamente
Si el evangelio es tan importante, ¿cómo puedes crecer tu entendimiento y apreciación de el? Aquí hay cinco sugerencias:
- Entender que no eres más aceptada o amada por Dios si comprendes todas las implicaciones del evangelio para la vida diaria, o si puedes comunicar las implicaciones del Evangelio claramente. Tu y yo somos aceptadas por fe solamente en Cristo.
- Según The Gospel-Centered Life (La vida centrada en el evangelio), la manera de crecer en el evangelio no es minimizar la santidad de Dios o tu pecado. A medida que tu conocimiento de la santidad de Dios y tu pecado crece, la cruz crecerá más y más en tu corazón y en tu mente. Sorprendente, ¿no?
- Arrepiéntete y cree diariamente. Arrepiéntete por abandonar a Cristo a favor de justicia basada en obras y cree otra vez en la justicia perfecta de Cristo aplicada a ti. Arrepiéntete y cree. Arrepiéntete y cree todo el día.
- Mira cómo los autores bíblicos modelaron esto e imítalos. Una y otra vez en el Nuevo Testamento vemos un patrón de declaración del evangelio (quienes somos en Cristo) y luego la expectativa del evangelio (cómo debemos vivir a la luz de esto). Pon atención a este patrón y comunícalo a otros. Cuando compartas una obligación del Evangelio, asegúrate de también compartir una declaración del Evangelio. Tim Keller lo pone así:
«El conocimiento de nuestra aceptación en Cristo… vuelve la ley de Dios en algo hermoso en vez de ser una carga. Ahora corremos la carrera de gozo que está ante nosotros en vez de correr por el miedo que está detrás de nosotros.»
- Consigue recursos centrados en el evangelio
- Porque me Ama: Como Cristo transforma nuestra vida diaria, por Elyse Fitzpatrick.
- Nuevas misericordias cada mañana, por Paul Tripp.
- ¿Qué es el Evangelio? Por Greg Gilbert.
- La Biblia de historias de Jesús: Cada historia susurra su nombre, por Sally Lloyd-Jones.
El hecho que:
el Titanic se hundió…
y que la humanidad dejara huellas en la luna…
y que la princesa Diana muriera…
no tiene mucho que ver con tu vida diaria, ¿cierto?
Pero si estas «en Cristo» el hecho que:
Jesús murió…
Y que resucitó…
Tiene todo que ver en tu vida diaria. Todo.
¿Son estas noticias de último minuto para ti? ¿Has pensado que el evangelio es bueno, pero consideras que son noticias anticuadas, o lo consideras nuevas y buenas noticias hoy, mañana, y pasado mañana?
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