¡Cuidado con el conformismo espiritual!

La primera vez que escuché la expresión "conformismo espiritual" fue en un sermón que alguien me recomendó escuchar. Estuve antenta a cada parte del mensaje y me dolió mucho encarar la realidad de mis inconsistencias. Reconocer que existe una gran brecha entre lo que sé y lo que practico y peor aún mi tranquilidad con este hecho. Es una gran pena que los cristianos seamos conocidos precisamente por no practicar lo que predicamos, tristemente empañamos el nombre de Cristo con nuestra conducta casi a diario.

Es un estado terrible estar habituados a una vida espiritual que no busca intencionalmente la santidad. ¿Te has dado cuenta cómo se acomodan ciertos pecados en tu vida y por una razón u otra te haces de la vista gorda? Y es esa frialdad hacia nuestra propia frialdad que nos congela en ese estado de no crecer, de aceptar que las cosas sean como son y ya. Sabemos que Cristo es nuestra libertad pero vivimos como esclavas, repetimos que en la Palabra de Dios se encuentra todo lo que necesitamos para la vida y la piedad pero buscamos el consejo del mundo. Y la lista sigue y sigue.

De alguna manera debemos aprender a estrechar la brecha de nuestras inconsistencias, de no adaptarnos a este mundo sino ser transformadas mediante la renovación de nuestra mente. El conformismo espiritual nos lleva a una zona muy peligrosa y esta es la hora de movernos y hacer algo al respecto. Afortunadamente no estamos solas en este proceso, el Señor nos ha dejado Su Espírtu, Su Palabra y otros medios de gracia para llevar a cabo la santificación progresiva en nuestras vidas. La otra buena noticia es que llegará el día en que seamos glorificadas junto con Cristo y que en medio de nuestras imperfecciones Su gracia sigue brillando y nuestro justificación y el perdón de nuestros pecados son perfectos.

Sin más preámbulos quiero dejar con ustedes el video ese sermón que le mencionaba al principio orando que Dios lo use para mover sus corazones y estrechar la brecha de sus inconsistencias.

Luego déjanos saber qué te pareció y cómo piensas poner manos a la obra.