Un hermoso conocimiento

Del equipo de Joven Verdadera: Estamos cambiando un poco las cosas aquí en el blog de Joven Verdadera. En lugar de publicaciones, las estamos guiando a través de un estudio Bíblico en línea. El estudio viene del libro más reciente de Erin, Una Historia Hermosa y Encuentros Hermosos (disponibles solo en inglés).  No necesitan copias de los libros para participar. Toma tu Biblia (y tal vez tu diario y una pluma), y únete a nosotras mientras miramos a Jesús a través de los ojos de cuatro mujeres del Antiguo Testamento.

¿Flor favorita? Margarita.

¿Color favorito? Amarillo.

¿Carro favorito? T-top Corvette.

Este es un juego que a mi esposo, Jason, y a mí nos encanta jugar. Siempre que tenemos un tiempo lejos solo nosotros dos, nos acomodamos y nos hacemos preguntas sobre gustos y disgustos, manías, y sueños sobre el futuro. Hemos estado casados por tanto tiempo que casi sabemos las respuestas de la mayoría de las preguntas. Pero seguimos haciéndolas porque cada pregunta es como una nota de amor que dice, “yo te conozco”.

Jason fue mi novio de la preparatoria. Dos décadas después, él me conoce mejor que cualquier otra persona en el planeta. Él puede ordenar por mí en los restaurantes porque ya sabe lo que me gusta. Él puede leer la expresión en mi rostro sin que yo diga siquiera una palabra. Suspiro. Romántico, ¿no es así?

Conocer y ser conocida es un hermoso regalo, y es lo que transforma la historia de Agar de una historia de rechazo y dolor a una historia de aceptación y propósito.

Toma un momento para leer la historia de Agar en Génesis 16.

El que me ve

Imagina a la persona que conoces mejor. Tal vez sea tu mamá, tu mejor amiga o tu hermana. Si es posible, mándale a esa persona un mensaje y hazle las siguientes preguntas:

1. ¿Cuántos cabellos hay en mi cabeza?
2. ¿Cuantos años voy a vivir?
3. ¿Cuál es la siguiente frase que voy a decir? (Haz que la adivinen antes de que la digas).

¿Cuantas respuestas correctas tuvieron? Cero, ¿correcto? No te preocupes, eso no quiere decir que tu mejor amiga no es en verdad tu mejor amiga o que tu mamá te adopto secretamente. Quiere decir que ellos nos son los principales expertos en ti. Hay Alguien que te conoce mejor que tus padres o tus amigas. Él incluso te conoce mejor que lo que tú te conoces a ti misma. Encontramos Su nombre en la historia de Agar.

Vuelve a visitar Génesis 16:13.

Agar llama al Señor “un Dios que ve” (LBLA). Ese es un nombre extraño, ¿no es así? Es como llamarme a mí “una mujer que escribe” o llamarte a ti “una jugadora de basquetbol”, pero esto era todo lo que Agar conocía sobre el carácter de Dios. Ella no sabía cómo más hablar de Dios; ella solo sabía que cuando nadie más la vio, Él sí lo hizo.

Otra manera de describir el ser vista es ser conocida. Agar enfrento circunstancias difíciles. Ella fue forzada a casarse con un hombre que probablemente no amaba. Ella estaba embarazada con un bebé que iba a tener que compartir con su señora. Ella era odiada por la mujer que estaba a cargo de su cuidado, y finalmente ella fue arrojada sola al desierto. La historia de Agar no es un cuento de hadas. Pero esa es la historia menor. Estamos estudiando para ayudarte a ver la historia superior. Hay una trama superior, algo más significativo en juego. La historia de Agar revela una pieza crítica del rompecabezas de quien es Dios.

Él es un Dios quien nos ve. Él es un Dios quien nos conoce.

Aprendiendo a Buscar el Evangelio

¿Es posible que la historia de Agar sea realmente sobre el evangelio? (Para refrescar lo que es el evangelio, lee la publicación de ayer).

Lee Gálatas 4:21–30.

Estas palabras fueron escritas por Pablo después del tiempo de Cristo en la tierra. Pablo sabía la historia menor. Él estaba consciente de los detalles de las vidas de Sarai y Agar, pero él no se detuvo aquí. Él busco la historia más excelsa, la historia del Evangelio.

Pablo utilizó a Agar y Sarai como símbolos para describir una verdad mayor, comparándolas a las dos como pactos. Agar representa un pacto (o promesa de Dios), y Sarai representa un segundo pacto. Si tienes un diario o un pedazo de papel a la mano, regresa al versículo y compara las diferencias entre el pacto de Agar y el de Sarai.

La historia trágica de Agar representa la vida sin Cristo. Ella estaba esclavizada al pecado y destinada a pasar eso a la siguiente generación. Esa es nuestra posición sin Cristo.

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La vida de Agar ilustraba la desesperanza de esta verdad. Ella era una esclava, sujeta a sus amos. La Escritura no nos da ninguna indicación de que ella alguna vez experimentara libertad.

En contraste, la historia de Sarai demuestra el pacto de libertad. La promesa de Dios a nosotras es que cuando rendimos nuestras vidas a Él y abandonamos nuestro pecado, experimentamos verdadera libertad. Nacimos como esclavas al pecado, pero por Jesús nuestras cadenas son retiradas y somos adoptadas como hijas de la promesa (Gal. 4:28).

Mira otra vez

A primera vista, Génesis 16 parece como una historia sobre una esclava embarazada en el desierto. Cuando miramos de nuevo, ¡vemos que es mucho más! La vida de Agar declara quién es Dios.

Me encantaría escuchar de ti. Déjanos un comentario compartiendo lo que aprendiste de la historia de Agar hoy y cómo has visto evidencia de que Dios es “un Dios que ve”.

No te pierdas la publicación de mañana. Vamos a correr a la Biblia juntas para aprender de la historia de Miriam.