«¿Por qué estas cosas me pasan solo a mí?»
«¿Por qué Dios no me da “eso” que quiero?»
«Estoy cansada de ________»
Para esta época del año, la blogósfera cristiana se llena de publicaciones sobre la gratitud y probablemente estás cansada de oír sobre el mismo tema; pero si te has encontrado diciendo o pensando algunas de las afirmaciones (quejas) anteriores o algunas parecidas, entonces necesitas leer este post.
La gratitud glorifica al Dador
Ahora, antes de hablar de gratitud quiero hablar de adoración, y no me refiero a lo que sucede el domingo antes de la prédica del pastor, la adoración va mucho más allá...
Adoración significa expresar admiración hacia alguien o hacia algo. ¿Sabías que todos somos adoradores? No solo somos los cristianos los que adoramos; todos fuimos creados con la necesidad de adorar y es tan natural para nosotros que lo hacemos sin darnos cuenta. Lo hacemos cuando invertimos nuestro tiempo, dinero, nuestros pensamientos, en el objeto de nuestra adoración, cuando ponemos eso por encima de otras cosas.
Quiero que te tomes un momento para pensar ¿en qué pones todo tu esfuerzo en estos días? ¿en ti misma? ¿en tu carrera? ¿en ese chico que te gusta? No podemos ser agradecidas cuando nuestra adoración no está centrada en Dios. Si nuestra adoración está enfocada en nosotras mismas, más orgullosas somos y por lo tanto, más abunda la queja en nuestro vocabulario; creemos que merecemos todo lo que no tenemos y que deseamos. Cuando el Salmo 37:4 dice que nos deleitemos en el Señor y Él nos concederá las peticiones de nuestro corazón, no significa que Dios nos dará todo lo que queremos, sino que al poner a Dios como centro de nuestra adoración, Sus anhelos serán los nuestros (tendremos verdadera gratitud) y por eso Él nos los concederá.
También adoramos a Dios al ser agradecidas, pues la acción de gracias de nuestra parte le trae gloria a Dios como dice 2 Corintios 4:15: «Y a medida que la gracia de Dios alcance a más y más personas, habrá abundante acción de gracias, y Dios recibirá más y más gloria». ¡Está todo conectado! Cuando adoramos a Dios correctamente, somos agradecidas y lo glorificamos nuevamente con nuestro agradecimiento.
Gratitud no es solo decir “gracias”
Ahora que sabemos que la gratitud proviene de una correcta adoración a Dios, ¿cómo lo adoramos verdaderamente? Para adorarlo primero tenemos que entender el Evangelio. Un corazón que es consciente de las bondades de Dios y su maravillosa gracia para con nosotros, es un corazón agradecido. Como lo dice el versículo que mencioné anteriormente: «Y a medida que la gracia de Dios alcance a más y más personas, habrá abundante acción de gracias, y Dios recibirá más y más gloria».
Me encanta como lo dice John Piper:
«La gratitud es el eco de la gracia mientras retumba a través de los huecos del corazón humano. Es la aceptación desvergonzada del regalo gratuito y la declaración sincera de que atesoramos lo que no podemos comprar. Por tanto, la gratitud glorifica la gracia gratuita de Dios y significa la humildad de un corazón necesitado y receptivo».
Así que si sientes que te estás quejando mucho últimamente, medita en la gracia y misericordia que Dios ha mostrado en tu vida, porque todas merecíamos la ira de Dios y en cambio Él nos ha dado vida eterna. Ése es el regalo más importante que jamás podrás recibir y después de ahí, todo lo demás que tenemos en nuestra vida es más gracia que Dios nos ha dado.
Ayúdanos a llegar a otras
Como ministerio nos esforzamos por hacer publicaciones de calidad que te ayuden a caminar con Cristo. Si hoy la autora te ha ayudado o motivado, ¿considerarías hacer una donación para apoyar nuestro blog de Joven Verdadera?
Donar $3¡Hey chicas! Nos encanta escuchar de ustedes, pero nos sentimos limitadas por las formas en que podemos ayudarlas.
Si buscas consejo te animamos a hablar primero con tu pastor o una mujer piadosa en tu vida, ya que ellos sabrán más detalles de ti y te darán seguimiento y ayuda.Lo publicado en la sección de comentarios no necesariamente refleja el punto de vista de Aviva Nuestros Corazones.
Nos reservamos el derecho de remover opiniones que puedan no ser de ayuda o inapropiadas. Puede ser que editemos o removamos tu comentario si: * Requiere o contiene información personal como emails, direcciones, teléfonos. *Ataca a otras lectoras. * Utiliza lenguaje vulgar o profano.
Únete a la conversación