Tanto como te sea posible, mantén tus ojos en la persona que esta hablando en lugar de atender más el material de estudio que tengas a mano. Escucha atentamente comprometiendo el lenguaje corporal.
Mantén tus respuestas breves, positivas y motivadoras.
o Gracias.
o Buen punto.
o Interesante pensamiento.
o Has hecho una pregunta muy importante.
o Aprecio tus puntos de vista.
o Esa es una aplicación difícil.
o La mayoría de nosotras nos podemos identificar con esa situación.
o Gracias por compartir algo desde tu corazón.
o Gracias por ser tan clara en tus ideas.
o Ese es un buen ejemplo a seguir.
• Evita decir cosas como:
o Eso esta mal.
o Eso esta bien.
o Ok.
• Usa los nombres de los miembros de tu grupo a medida que respondas a sus comentarios.
• En caso de ser necesario aclara cualquier confusión que se presente. Esta bien decir: “no sé”. Dale seguimiento a la información solicitada o a la duda que haya quedado en ese momento, de forma tal que puedas responderla oportunamente luego de consultar con la persona líder de tu ministerio o el pastor de tu iglesia.